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La estrella mundial Katy Perry se encuentra en Sudamérica como parte de los conciertos de su Witness Tour, pero como no todo es trabajo, se ha dado tiempo de disfrutar del clima tropical y de sus amigos en países como Chile, Argentina, Brasil y Perú.
Perry fue captada en una pool party (fiesta de alberca) dentro de un elegante hotel en Brasil después de cantar y bailar frente a cientos de fanáticos que corearon canciones como Roar y California Gurls.
La cantante de 33 años de edad disfrutó de la compañía de sus amigos y se sumergió en la piscina con un traje de baño strapless de una pieza, color guinda con flores en tonos beige, que dejó su espalda al descubierto.
Pero al parecer la intérprete de I Kissed a Girl sintió algo extraño en la parte inferior de su traje de baño y se alejó unos pasos de donde se llevaba a cabo la fiesta para tratar de aliviar la incomodidad que sentía en la entrepierna.
El año pasado, al vacacionar en Italia, la cantante fue captada en una pose similar. Mientras tomaba el sol en la arena de las playas de Capri, Katy aprovechó que sus amigas estaban distraídas para rascarse un poco.
Perry y sus amigos pasaron unos momentos divertidos en la alberca al interior del hotel brasileño, donde jugaron a salpicarse agua y tomaron algunas bebidas.
Al salir del agua, los empleados del lugar la ayudaron a secarse con una toalla y luego cubrió su cuerpo con una bata de grecas, ya que la gira de conciertos continúa y no sería un buen momento para contraer un resfriado.
El domingo pasado, durante su presentación en Río de Janeiro, Katy Perry rindió un homenaje a la concejala brasileña Marielle Franco, quien fue asesinada a balazos la semana pasada.
La compositora de Unconditionally llamó al escenario a la hija y a la hermana de la activista y pidió un minuto de silencio por su muerte.
Las siguientes cinco fechas de Katy están programadas para mayo en tres ciudades de México.
