Desde su llegada a cines por primera vez, en 1977, Star Wars sorprendió al mundo del entretenimiento y estableció lo que algunos fanáticos incluso consideran una religión.
Algunos corazones se rompieron cuando Jorge Lucas, creador de la saga, anunció que su producción de películas intergalácticas había terminado. Sin embargo, la visión de Disney nos ha permitido seguir con la aventura.
El pasado fin de semana, la compañía madre de Mickey Mouse lanzó la precuela Rogue One: A Star Wars Story simultáneamente en sus principales mercados alrededor del mundo (con excepción de China y Corea del Sur). Con esto, tan solo en Estados Unidos, el largometraje se convirtió en el segundo lanzamiento de diciembre más grande de la historia, generando ganancias por 155 millones de dólares en ese país.
Con esta cifra, además, se convirtió en el segundo lanzamiento más relevante del año, así como en uno de los estrenos más importantes en la historia del cine.
A nivel global, en tan solo un fin de semana, la película ya generó 290.5 millones de dólares. Bien valió la pena la inversión de cuatro mil millones de dólares que pagó Disney a LucasFilm en 2012, para convertirse en dueña de la marca.
Para los amantes de la trilogía original, compuesta por IV-A new hope(1977), V-The Empire Strikes Back (1980), y VI-Return to the Jedi(1983), Rogue One llegó para romper una larga tradición en la historia de la marca. Es la primera vez en que se presenta una trama donde el centro de atención no se basa en el clan Skywalker. Además, la historia resulta también mucho más oscura y violenta, por su enfoque en la guerra.
Aún así, ni los más puristas pudieron resistir asistir a las salas para ver, con sus propios ojos, de qué se trataba esta última producción. Aunque hemos de aceptar que las ventas apenas se acercaron a los impactantes récords que estableció Star Wars: The Force Awakens, cuando salió al mercado hace un año.
Esta película, también producida por Disney, generó ganancias de 248 millones de dólares cuando se estrenó en las salas de cine estadounidenses.
Aún así, los números son alentadores y Disney ha confirmado que seguirá produciendo largometrajes de Star Wars similares. Actualmente, la compañía ya trabaja en su próximo proyecto, donde buscará contar la historia de los primeros años de Han Solo.