Salma Hayek fue el centro de atención de los fotógrafos al llegar al desfile de Saint Laurent en la Semana de la Moda de París.
Deslumbró al usar un ajustado vestido verde esmeralda de corte recto que tenía tela transparente en la parte del escote. Completó el look con un blazer negro, zapatos de plataforma y accesorios llamativos que incluyeron un collar dorado, anillos verdes y una cartera negra.
Su maquillaje estuvo compuesto por base, sombras verdes brillantes, amplias pestañas negras, labios nude y rubor en las mejillas. Peinó al estilo diadema su cabellera negra.
Salma estuvo acompañada en el desfile de modas por su esposo, el multimillonario François-Henri Pinault, y su hijastra Mathilde Pinault. Mathilde conquistó con un vestido beige ajustado a su silueta, bolso y tacones a juego, además de una chamarra de cuero.
Otras de las estrellas presentes en el desfile fueron Rosie Huntington-Whiteley, Olivia Wilde, Zoe Kravitz y Dua Lipa.
Mathilda Pinault es fruto de la relación que François-Henri Pinault mantuvo hasta 2004 con la diseñadora Dorothée Lepere. La joven tiene 22 años y, de acuerdo con la revista People, estudia negocios en la Emylion Business School.
Según declaraciones recogidas por la revista Hola, Mathilda admira a Salma Hayek y cree que es una diva:
“Es una diva, tiene una vida complicada, pero me enseñó lo importante que es saber simplificar las dudas y los miedos, redimensionándolos a la sencillez de la vida cotidiana. La llamo a menudo, y cuando algo no funciona tiene el poder de quitarle hierro al asunto y convertirlo en un obstáculo que hay que afrontar poco a poco”.
Mathilde Pinault
Salma Hayek es una de las mexicanas con más éxito en Hollywood. La originaria de Coatzacoalcos, Veracruz, se mudó a Estados Unidos a inicios de la década de los 90, luego de probar las mieles del éxito en telenovelas mexicanas.
Hizo su primera aparición en el cine americano en la película Mi vida loca (1993), pero explotó su fama en From Dusk Till Dawn (1996) y consiguió una nominación al Oscar por su protagónico en Frida (2002).
Sin embargo, no olvida cómo inició su carrera y los esfuerzos que conlleva todo el proceso.