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Salma Hayek robó suspiros en redes sociales al compartir dos fotografías de sí misma haciendo alarde de su figura de impacto apenas cubierta con un par de toallas mientras se relajaba en un sauna.
La celebridad, de 56 años, posó frente a la cámara recostada sobre un panel de madera, casi desnuda, con una toalla cubriendo su pecho y otra más colocada sobre el área del bikini.
Además de presumir la figura de ensueño que conserva a su edad, Salma mostró su belleza al natural, con su rostro sin maquillaje y su cabellera oscura húmeda.
“Abrazando el poder curativo del sauna y sudando el estrés esta Semana Mundial del Bienestar”, escribió en el pie de foto, recolectando cientos de likes y comentarios al instante.
Su actualización en Instagram sucede después de compartir detalles de su viaje a España y de hacer una mediática gira de promoción para Black Mirror, serie de ficción en la que recientemente actuó.
La celebridad veracruzana interpreta a una versión alternativa de sí misma en la serie de Netflix. “Fue tan extraño, pero es Black Mirror, entonces, ¿por qué esperar algo más que extraño. Me sorprendió cuando leí el guión”, dijo la estrella en una presentación que hizo en GMA.
Agregó que no fue difícil interpretarse a sí misma y que por el contrario se sintió con la libertad de burlarse de sí misma. “No es difícil interpretarme a mí misma. es como una parodia de mí. Tengo muy buen sentido del humor conmigo mismo. Es como una oportunidad para burlarse de uno mismo, te da la libertad de ser muy audaz”.
Si bien su episodio fue uno de los mejores recibidos por la audiencia, hubo otros que fueron criticados por los actores que intentaron hacer acentos escoceses de forma fallida.
En redes sociales surgieron un sin fin de críticas hacia el programa de Netflix por presentar a una pareja, mitad estadounidense, mitad escocesa, mientras filmaba un documental. Los espectadores dijeron que se sintieron perturbados por los acentos no nativos que intentaron imitar.
“Llevo un minuto de los escoceses en Black Mirror y ya tuve que hacer una pausa para encogerme por los acentos, ¿por qué no podemos ser normales en la tele? ¿por qué no podemos ser interpretados por escoceses de verdad?”, escribió un internauta.
Según los informes, el primer episodio, Joan Is Awful de Salma Hayek, tuvo mejor aceptación y mayor rating que el resto de episodios, esto gracias a la trama distópica y a las actuaciones de los protagonistas.
