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Expertos del cine creen que fue el fracaso de la cinta El gurú del buen rollo, que el actor decidiera abandonar casi por completo el mundo cinematográfico. Esta película fue estrenada en 2008 y fue mal recibida por el público y la crítica. No logró recuperar los 62 millones de dólares invertidos, y solo se recaudaron 41 millones de dólares.
En una entrevista con GQ en 2014, Myers confesó que había varios fragmentos de la película que le gustaban, pero que no encontró a su público. En esa misma entrevista, el periodista le preguntó sobre una crítica que había hecho el New York Times. Myers respondió: “Nunca la había leído. No la leeré y me gustaría no saberlo”. De igual forma, reconoció que había tomado la decisión de pasar algo de tiempo con su hijo, lejos del set.
Mike Myers se convirtió en padre por primera vez al lado de Kelly Tisdale en 2011. “Cada vez que hago una película, dejo pasar tres o cuatro años. Hace dos años y medio tuve a mi primer hijo y quería estar presente. Ha sido el momento más feliz de mi vida”, declaró en la misma entrevista.
A inicios de mayo estuvo presente en el programa de Jimmy Kimmel, pero en esta ocasión fue conducido por Will Arnett. “Me encanta Estados Unidos. Son fantásticos, en serio. Son como una enorme paleta de amor y quiero comérmelos hasta el palito”, dijo en su participación.
Parecía que Myers había logrado encontrar un público de nicho, que estaba dispuesto a reír mientras lo veía hacer tonterías. Sin embargo, el público que lo acompañó con el éxito de Austin Powers rápidamente se aburrió de él. Parece que este actor canadiense tiene el camina hacia la cima bastante complicado.
