La denuncia contra Toback es el resultado de una larga investigación del diario Los Angeles Times, en la que 31 de 38 actrices declararon abiertamente contra el director y guionista de 72 años, nominado al Óscar por "Bugsy".
Según la publicación, Toback estaba acostumbrado a "vagar por las calles de Manhattan en búsqueda de muchachas atractivas", a quienes les ofrecía una carrera en el mundo del cine aprovechando sus conexiones.
Pero en las reuniones, pactadas como entrevistas o audiciones, llevaba la conversación a temas desagradablemente personales, con preguntas que iban desde la masturbación hasta el vello púbico, y frente a muchas se masturbó y eyaculó.
"Me sentí como una prostituta, una absoluta decepción para mí, mis padres, mis amigos. Y no merecía contarle a alguien", contó la actriz Adrienne LaValley sobre un encuentro en 2008 con el director, que trató de frotar con su pierna el entrepierna de ella, que apenas lo sintió retrocedió. Ahí, contó al diario, Toback se levantó y eyaculó en su pantalón.
El director supuestamente pedía además que las muchachas se desnudaran para probar su facilidad ante la cámara.
Ninguna denunció a la policía los encuentros en su momento.
Toback rechazó los señalamientos, asegurando al Times que nunca conoció a las mujeres o que, si lo hizo, "fue por cinco minutos y no tiene recuerdo".
Su agente no respondió aún a los llamados de la AFP por un comentario sobre el caso.
Toback ha sido guionista y director de cine desde 1974. Su más reciente película "The Private Life of a Modern Woman", que tiene como protagonista a Sienna Miller, se estrenó este año en el Festival de Venecia.
El caso sigue al escándalo de Weinstein, acusado por más de 40 mujeres de acoso, agresión sexual y violación y ahora es investigado por las policías de Nueva York, Londres y Los Ángeles.
Al mismo tiempo, denuncias de pedofilia también salpicaron a Hollywood.
El actor y músico Corey Feldman denunció haber sido abusado sexualmente cuando era un actor infantil al igual que su compañero, ya fallecido, Corey Haim. Nadie los tomó en serio.
Ahora, escribió en Twitter el jueves que estaba "contento que la gente esté hablando" y que "reza para que otros también salgan" a la luz.
"Estoy trabajando en un plan" para "obtener justicia", indicó, asegurando que hay "muchos testigos de los crímenes" que ha denunciado y que no han dicho nada.
Sus declaraciones fueron reproducidas por medios de prensa, mientras el ganador del Óscar Paul Haggis comentó en The Guardian sobre el caso: "¿estaba la gente protegiendo a pedófilos también?"; Hollywood "no es un lugar inocente y nunca lo fue".
La semana pasada, el agente Tyler Grasham fue suspendido como parte de una investigación interna por acusaciones de abuso sexual de jóvenes estrellas, mientras la actriz Reese Witherspoon dijo que fue abusada por un director cuando tenía 16 años.
Dos nuevas mujeres salieron de las sombras para acusar al ganador del Óscar Roman Polanski de haberlas agredido sexualmente a principios de los años 70 cuando tenían 10 y 15 años respectivamente.
Su abogado, Hervé Temime, negó a la AFP estas nuevas acusaciones.
"Los únicos hechos que se le pueden incriminar son los que conciernen a Samantha Geimer que reconoció ante la corte hace 40 años", dijo sobre el crimen por el que el director se declaró culpable en Estados Unidos pero huyó poco antes de que se dictara sentencia.