Los Picapiedra fue una de las series animadas más queridas y aclamadas por las generaciones de niños que crecieron viéndola entre la década de los 60 hasta los 90.
Después de significar un éxito para sus creadores William Hanna y Joseph Barbera, la serie animada tuvo dos live-actions, el más popular estrenado en 1994, con las actuaciones estelares de John Goodman como Pedro Picapiedra y Elizabeth Perkins, como Wilma Picapiedra.
John Goodman tuvo gran reconocimiento por esta película hasta el punto de ser un referente de la película todavía en la actualidad.
Recientemente el actor y ganador de un Emmy dio de qué hablar por aparecer en público con un drástico cambio físico, alejado de su personaje de Picapiedra y de los personajes que interpretó posteriormente en Loca Por Las Compras, El Gran Lebowski y Coyote Ugly.
Durante su asistencia a un evento vinculado al Festival De Televisión, llevado a cabo en Montecarlo, el actor, de 70 años, desfiló por la alfombra roja con más de 90 kilos de peso menos.
Según los informes, comenzó a bajar de peso en 2007, cuando se propuso llevar una vida más sana y abandonar el hábito de tomar alcohol.
El reto no lo cumplió solo, estuvo acompañado de un entrenador especializado que se propuso hacerle perder de peso y mejorar su condición física, principalmente con un plan de alimentación a largo plazo con dietas mediterráneas y con una rutina de ejercicio de seis días a la semana, que incluye caminatas de 10 mil a 12 mil pasos y ejercicios en bicicleta elíptica y en caminadora.
En una entrevista con Howard Stern, Goodman señaló: “Me lo tomé con calma. Sólo quería cambiar mi estilo de vida”, también señaló sus hábitos como “un proceso continuo por el resto de mi vida”.
Uno de los problemas de Goodman, según consideró por años, era su amor por la comida y los esfuerzos desperdiciados al no ser estricto con las dietas.
“En los viejos tiempos, me tomaba tres meses, perdía 60 o 70 libras (27 a 31 kilos), y luego me recompensaba con un paquete de seis (cervezas) o lo que fuera y simplemente volvía a mis viejos hábitos”.
En 2018, hablando con AARP, el actor dijo que sus dietas y esfuerzos terminaban siendo fallidos debido a que trataba de controlar sus porciones, en lugar de comer comida sana, después de intentarlo, terminaba “metiéndose toda la comida en la boca”.
Tras decidirse y comenzar el camino a una vida más sana, Goodman se propuso llevar el proceso de firma lenta, pero eficaz, primero abandonando por completo el alcohol.
“Esta vez, quería hacerlo diferente. Muévete, haz ejercicio. Estoy llegando a la edad en la que ya no puedo permitirme quedarme quieto”.