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Lauren Sánchez, la novia del multimillonario Jeff Bezos, elevó la temperatura en Los Ángeles al ser vista modelando un pequeño vestido ajustado de estilo lencero, hecho con látex negro.
El vestido que lució sin sostén presentó ajuste en el torso y cadera, así como un prominente escote redondo, finos tirantes y una peligrosa abertura en la parte posterior de la falda.
Como siempre lo ha hecho con la ropa que modela en público, este atuendo le ayudó a lucir sensual y atractiva, incluso joven a sus 54 años.
Agregó finos brazaletes negros con transparencias, pendientes circulares a juego, un discreto collar con piedras preciosas, así como anillos, un reloj de lujo y gafas glaras estilo los 70.
Destacó su belleza con maquillaje que le dio efecto de porcelana a su piel, labial nude, sombras oscuras en los párpados, blush bronceado y un cat eye negro que destacó su mirada felina. Su cabello se mostró peinado de lado en voluminosos mechones ondulados.
La futura esposa del multimillonario Jeff Bezos fue vista por los paparazzis llegando a una cena al Catch Steak de West Hollywood para celebrar el cumpleaños de sus amigos Mark Birnbaum y Tori Praver. El fundador de Amazon estuvo ausente en la celebración.
Días antes de su avistamiento en público, la celebridad estadounidense compartió en redes sociales una publicación dedicada a su hijo Nikko con motivo de su graduación.
Lauren Sánchez festejó a su primogénito en compañía de su exesposo Tony González, su actual esposa y Bezos.
La reciente fiesta familiar se produce en medio de los preparativos para la boda de lujo de Lauren y Jeff después de poco más de un año de compromiso.
La presentadora de televisión, de 54 años, le dijo a Vogue que la planificación del gran día estaba en las primeras fases.
“Todavía estamos pensando en la boda y en lo que va a ser. ¿Será grande? ¿Será en el extranjero? Aún no lo sabemos”, señaló.