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La fotografía de su registro como preso, fue lo mejor que le puso pasar a Jeremy Meeks, pues cuando esta se hizo pública en 2014 el mundo se rindió a sus pies y lo nombraron “el preso más guapo del mundo”.
Paradójicamente, mientras las puertas se cerraban para mantenerlo en prisión por el delito de portar un arma sin licencia, esa fotografía le abrió las puertas del mundo de la moda, pues desde entonces varias agencias buscaron contratarlo cuando obtuviera por fin su libertad.
En marzo salió de la cárcel, pero tuvo que seguir unas semanas más en arresto domiciliario y esta hasta el día 15 de junio que surge su primera imagen como modelo profesional.
El ex convicto ha sido seleccionado por la agencia White Cross Managment para promocionar los productos del equipo de básquetbol Golden State Warriors, quienes se encuentran a un juego de obtener el campeonato de la NBA, de acuerdo con The Wrap.
En su cuenta de Instagram en el que los siguen miles d personas, Meek muestra su foto portando una de las gorras del equipo comandado por Stephen Curry.
Jeremy Meeks ha sido un “cliente” habitual de los departamentos de la policía del área de la bahía en California, ha pasado hasta dos años en prisión por robo, y fue gracias a la foto viral del 2014, en donde sus ojos azules, labios carnosos y piel morena, lo convirtieron en una sensación en las redes, que ahora comienza a capitalizar.
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