Caitlyn Jenner pudo haber elegido esta apuesta hace 19 años en Nueva York, pero en realidad lo hizo un aventurado hombre llamado Brian Zembic quien se convirtió en una leyenda.
Zembic era conocido en la llamada ciudad del Pecado por ofrecer espectáculos de magia y su constante afición a las apuestas, pero su fama creció cuando accedió a una que hoy es considerada única en la historia.
Al hombre le apostaron que no se implantaría senos de mujer y encima que debía mantenerlos consigo durante un año completo.
Pero Zembic aceptó el desafío, se sometió a una cirugía para que le colocaran los implantes cuyos tamaños eran evidentes y los mantuvo durante el tiempo estipulado en la apuesta.
Para que todo quedara establecido y avalado formalmente, el desafiante y Zembic firmaron un contrato.
El tamaño de los implantes que le colocaron al sujeto correspondió a la talla 38C.
La cirugía tuvo un costo de 45 mil dólares y fue realizada en Nueva York.
Eso ocurrió en 1996 y a cambio recibió 100 mil dólares que actualmente valdrían 150 mil.
Decisión peculiar
Varios pensarían que Zembic se quitaría los implantes pasado el tiempo del desafío pero el sujeto se acostumbró a ellos y decidió quedárselos informó The Daily Mail en 2013.
Sin embargo reconoció que esa ha sido la apuesta más “estúpida” que había aceptado en su vida.