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La socialité Kim Kardashian se robó todas las miradas al asistir a la Gala de Arte y Cine LACMA 2024 repleta de estrellas en Los Ángeles.
La influencer de redes sociales fue el centro de atención al aparecer ataviada con un espectacular vestido blanco de Gucci. La prenda tenía un amplio escote al centro, donde la tela se unía hasta el ombligo.
Este estilo de vestido dejó a la vista al protagonista de su outfit, un collar de cruz de amatista de la princesa Diana, que lució en una gala benéfica en 1987. La empresaria agregó una gargantilla de perlas y lució una cabellera corta para presumir sus joyas.
Kim Kardashian, de 44 años de edad, completó el outfit con un abrigo en color crema.
Otras celebridades que brillaron en el evento, patrocinado por Gucci, fueron Blake Lively y Kaia Gerber.
LACMA Gala anual Art+Film, apoya la programación curatorial, las exposiciones, las adquisiciones y otros programas del museo que exploran la intersección entre el arte y el cine.
Este año, el evento celebró al escritor y director de “Elvis”, Baz Luhrmann, y a la escultora Simone Leigh, con la fiduciaria del LACMA, Eva Chow, y el actor Leonardo DiCaprio actuando como copresidentes por 13.º año consecutivo.
Los fondos recaudados en la Gala Art+Film anual apoyan la iniciativa del LACMA para hacer que el cine sea una parte más central de la programación curatorial del museo. Además, financian la misión más amplia del LACMA, que incluye exposiciones, adquisiciones, programación educativa y proyecciones que exploran la intersección entre el arte y el cine.
Kim Kardashian, conocida mundialmente por su figura, ha captado la atención recientemente al mostrar una cintura más pequeña y unas piernas más tonificadas que nunca.
En una entrevista con Vogue, explicó que su rutina diaria se centra en el ejercicio, comenzando sus entrenamientos a las 5:30 de la mañana. A veces, esto implica que solo duerma cinco horas por noche, pero Kardashian afirmó que se siente en la mejor forma física de su vida.
Sin embargo, durante la Met Gala de 2022, Kim enfrentó críticas cuando reveló que había perdido más de 7 kilos para poder usar el icónico vestido que Marilyn Monroe llevó en el cumpleaños del presidente Kennedy en 1962.
Para alcanzar su objetivo de pérdida de peso, Kardashian detalló que utilizó un traje de sauna dos veces al día, corrió en la caminadora, eliminó azúcares y carbohidratos de su dieta y consumió exclusivamente vegetales y proteínas ‘limpios’.
Ante las críticas, Kim Kardashian defendió su régimen, comparándolo con la transformación extrema de Christian Bale para su papel en “The Machinist”, y aseguró que no realizó nada perjudicial para su salud.
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