La situación se ha complicado, pues no esta claro quién tiene los derechos legales para vender la propiedad, ¿las monjas o el arzobispo?
La propiedad solía ser el convento de las hermanas del corazón inmaculado de María y las monjas ya habían hecho su propio arreglo para vender la propiedad.
Ellas ya habían firmado papeles con una restaurantera para venderle el terreno y el edificio estilo villa construido en la propiedad por 15.5 millones de dólares.
Según Los Ángeles Time la venta se realizó hace un par de semanas.
En el pasado hasta 52 monjas habitaron el convento, pero en el 2011 la arquidiócesis transfirió a la mayoría de las monjas a otros conventos.
En la actualidad 5 monjas habitan el convento y dos de ellas alegan que son las dueñas del mismo.
Katy Perry se reunió con las monjas para hacerles un ofrecimiento más personal y cantó para ellas Oh Happy Day de la película Sister Act con Whoopi Goldberg, pero a diferencia de la película las monjas de Los Ángeles no quedaron nada impresionadas con la presentación.
Es más la hermana Rita Callanan de 77 años, afirmó que “los últimos días han sido todo menos felices gracias a esta situación”, aludiendo al titulo y al tema de la canción interpretada por Perry.
La vocera de la arquidiócesis Mónica Valencia comentó que el trato ya se ha hecho con la cantante y no hay marcha atrás y que la arquidiócesis se ha comprometido de cuidar de las monjas.
Las monjas como única respuesta pusieron el grito en el cielo, pidiendo la ayuda de Dios, pues le van a dar la batalla a Perry y al arzobispado.
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