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La actriz Jennifer Lawrence acaparó los reflectores durante el estreno de la película No Hard Feelings, en la ciudad de Londres, en Inglaterra.
La celebridad utilizó un vestido negro con detalles bordados, escote redondo y tela traslúcida en el torso para unirse a la tendencia del momento de lencería a la vista.
Lawrence, de 32 años, combinó su glamoroso outfit con zapatillas negras puntiagudas y un par de guantes largos brillantes.
El vestido transparente que usó la estrella es una creación de la firma de lujo Christian Dior, con inspiración en el antiguo estilo de Hollywood.
Además, peinó su cabello rubio en una elegante cola de caballo, lo que hizo lucir el maquillaje smokey eye que llevaba y sus aretes de Anita Ko, con un valor de más de 12 mil dólares.
Jennifer Lawrence acudió a la premiere en Londres de su nueva película No Hard Feelings, que coprotagoniza junto a Matthew Broderick. El estreno en cines de la cinta está programado para el próximo 22 de junio.
Bajo la dirección de Gene Stupnitsky, esta comedia romántica cuenta la historia de un adolescente universitario a quien sus ricos padres le buscan una pareja y se encuentra con una joven que decide ayudarle a salir de su caparazón en un intento por conseguir dinero para cubrir sus deudas.
En el evento en Londres, el atuendo de Lawrence contrastó con el atuendo que llevó al Festival de Cine de Cannes, donde causó conmoción por llevar chanclas.
Luego de la controversia que desató su look, la actriz declaró que no estaba haciendo una reivindicación política, sino que los zapatos que tenía planeados para combinar su vestido eran demasiado grandes.
Jennifer Lawrence contó que llevaba tacones en la alfombra roja, pero olvidó que no se había tomado una foto con si equipo de producción y temió que al bajar las escaleras de regreso con esos zapatos se pudiera caer, así que se puso chanclas.
