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La modelo presumió su belleza con sus más de 12 millones de seguidores en Instagram, al compartir imágenes de una sesión de fotos.

La ex pareja de Bradley Cooper lució su esbelta silueta con un minivestido negro, de manga larga y corte asimétrico a la altura de los muslos, en un set con fondo azul grisáceo, para destacar su piel bronceada.

Para la sesión, Irina utilizó una peluca corta con un diminuto fleco, así como maquillaje en tonos claros, para dar la impresión de naturalidad.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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La serie de fotografías fueron tomadas por Hugo Comte para la revista 032c, con maquillaje de Tatyana Makarova y un diseño de estilo de Marc Goehring.

La modelo de 33 años acaba de pasar unos días de descanso con su hija Lea, en la costa de Ibiza, antes de que el verano llegue a su fin.

y Cooper llegaron a un acuerdo para compartir la custodia de la pequeña de dos años, luego de que se separaron en junio pasado.

Aunque en julio fue captada con Alec Maxwell, el director creativo de la edición británica de Vogue, una fuente cercana a la top model reveló que no busca una relación, por ahora. La actriz quiere enfocarse en la crianza de su hija y en su carrera en la industria de la moda.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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Además, la modelo rusa quiere descansar de las relaciones, tras pasar cuatro años junto a , y sanar del desgaste emocional que implicó su separación.

Una mujer que ha sido esencial para Irina en estos meses, es su madre Olga. La ha ayudado estar al pendiente de Lea mientras tiene que trabajar y Bradley también.

Mira en la galería de la parte superior los mejores looks de.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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pba

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