El creador de contenido español y activista de la fauna, Frank Cuesta, fue ingresado de urgencia en un hospital tailandés luego de recibir el veneno de una cobra escupidora, unas de las serpientes más letales del reino animal.
El incidente generó una ola de preocupación entre sus seguidores, quienes han inundado las redes sociales con mensajes de apoyo.
Las cobras escupidoras, son un género de serpientes que no solo inyectan veneno al morder: son capaces de lanzarlo con precisión hacia los ojos o el rostro de sus agresores.
Esta habilidad, es una adaptación desarrollada por convergencia evolutiva en varias especies de cobra de forma independiente. Su veneno puede ser absorbido por las mucosas humanas como los ojos, la boca, la nariz o alguna herida causando dolor extremo, ceguera temporal o permanente y síntomas neurológicos.
Estudios científicos revelan que estas serpientes no disparan al azar, sino que apuntan conscientemente con hasta un 90% de precisión.
A pesar de la gravedad del incidente, Frank Cuesta se encuentra estable y fuera de peligro, según confirmó su pareja, Paloma, a través de un video difundido en el canal de Youtube del creador.
"Ya han pasado las 24 horas desde el envenenamiento, asi que ya no hay peligro dentro del sistema central" compartió su pareja, "los doctores están alucinando con la resistencia que tiene Frank al veneno".
Como lo menciono la pareja de Cuesta, el equipo médico que lo tenía a su cargo lo mantiene en observación y recibirá el tratamiento para mejorar su condución. Por ahora su evolución es positiva.
El ataque de la cobra escupidora es solo uno de los infortunios que le ocurre a Frank Cuesta, quien recientemente cerró sus redes sociales y manifestó su intención de alejarse del foco mediático, afectado por problemas legales y personales.
El activista se ha visto envuelto en la polémica, tras ser arrestado bajo la acusación de posesión ilegal de especies protegidas, el pasado 27 de febrero.
Frank Cuesta fue detenido en Tailandia bajo la acusación de posesión ilegal de especies protegidas en su propio santuario, ubicado en el distrito de Lao Khwan, provincia de Kanchanaburi.
Un espacio que ha sido el objeto una disputa con su expareja y madre de sus hijos y que ha expuesto el creador en sus propias redes.
Miles de fans han reaccionado con mensajes de aliento buscando que mejore su estado de salud, sin embargo, al 19 de abril de 2025 se reporta fuera de peligro.