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Eva Longoria se ha convertido en una de las reinas del Festival de Cine de Cannes con su asistencia anual, no sólo por su trabajo dentro de la industria hollywoodense, sino por su estilo y por ser una referencia de moda.
La actriz, de 49 años, lució uno de sus más atrevidos looks durante la premiere de Emilia Perez, película que protagonizan Selena Gomez, Karla Sofía Gascón, Zoe Saldaña y Edgar Ramírez.
Fue fotografiada ataviada en un maxivestido verde aqua recortado con un panel descubierto sobre sus abdominales y una arriesgada aventura en la pierna derecha que partió desde la cadera.
La prenda contó con escote corazón, finos tirantes, así como tirantes de pedrería plateada de Elie Saab Counture.
Combinó el atuendo con sandalias de tacón de aguja plateadas y tiras brillantes, pendientes largos y anillos de diamantes de Chopard.
Mantuvo una apariencia glamurosa con maquillaje que le dio efecto de porcelana a la piel, párpados ligeramente ahumados, labial nude y blush bronceado.
En tanto, su cabellera color chocolate se lució peinada en una cola de caballo alta con mechones ondulados.
Durante su paso frente a las cámaras se lució alegre y sonriente. Previo a la alfombra roja de Emilia Perez, Eva fue fotografiada llegando al Palais des Festivals para la proyección de Kinds of Kindness con otro vestido de Elie Saab.
Los fotógrafos la captaron luciendo más sensual y bella que nunca con un vestido plateado de cristales bordados, diseñado con escote en V abierto y ajuste en la cadera.
Eva Longoria ha regresado año tras año a Cannes, cada vez más glamurosa e impactante, después de haber debutado en el festival en 2005 con un vestido de 40 dólares que compró en Melrose, California.
La actriz reveló en una entrevista con People que para su primer festival compró un vestido sencillo sin saber la relevancia e impacto del evento en el mundo del entretenimiento mundial.
"Pensé, me pondré este, este tejido dorado, se siente bien. Nadie hubiera sabido que era un vestido de $40", dijo.
Recordó su confusión en el evento cuando le preguntaron "a quién" estaba usando; es decir, qué marca o qué diseñador había hecho su vestido. "Yo estaba como: ‘¿Qué quieres decir? Es mío’. A todos les encantó el vestido, y yo estaba como, ¡es sólo de Melrose!”.
