Emily Ratajkowski fue captada en medio de un paseo por Nueva York en compañía de su nueva mascota, Colombo.
La top model desfiló por las calles de la Gran Manzana ataviada con un conjunto blanco. Al ser fotografiada, sostenía de la correa del pequeño cachorro que adoptó hace unos días.
Presumió de su estilizada figura con un pantalón de corte alto y un top corto de tirantes al estilo braless que enmarcaba su definido abdomen.
Foto: The Grosby Group
Añadió un par de zapatillas deportivas blancas, un pequeño bolso de colores con estampado de serpiente y amplias gafas solares.
Emrata, como la celebridad se hace llamar en redes sociales, definió su belleza con maquillaje bronceado y labios nude. Dejó libre su melena oscura, la cual se ondeaba con el aire que golpeaba la ciudad.
Posterior a la Met Gala de este año, donde causó euforia con diminutas prendas de Dundas, la modelo de 27 años se dirigió a Instagram para compartir la llegada de Colombo a la familia.
“Todos aquí tenemos bebés (Kim, Megan, Amy), pero ahora nosotros tenemos a un nuevo chico especial. Conozcan a Colombo”, escribió junto a una foto donde aparecen su mascota y su esposo.
Días después volvió a compartir un par de imágenes más del pequeño cachorro negro, la primera durante un paseo casual y la segunda en una cena.
A inicios de este año, Ratajkowski y su marido, Sebastian Beaar-McClard, fueron acusados de vivir en un exclusivo departamento en Nueva York sin pagar renta.
Se dio a conocer que la pareja vive bajo las condiciones de la ‘Ley Loft’, una laguna jurídica que protege a las celebridades con dificultades económicas de ser desalojados por los dueños originales de las propiedades.
Sebastian comenzó a subarrendar el departamento en 2013. Después de que terminó el contrato en 2017, dejó de pagar el alquiler lo que, hasta la fecha, le ha sumado una deuda de 120 mil dólares.
Ante esto, el matrimonio se ha mantenido al margen después de que Emily desmintiera la acusación publicada por New York Post.
Vía Twitter, Emily defendió a su esposo con el siguiente mensaje:
“Mi marido tiene 38, no 31. Es un productor de cine independiente. La gente piensa que es rico, pero no. Fue criado en el vecindario en el que vive ahora. Sus padres son artistas que tenían sus casas en el centro de Nueva York”.
“Me mudé con él hace un año. Estoy orgullosa de que está luchando contra un conglomerado inmobiliario que compró el edificio en el que vive por 40 millones y continúa difundiendo información errónea sobre sus inquilinos para poder beneficiarse. La ciudad de Nueva York ha cambiado tanto y es una lástima que la gente que trabaja en campos creativos se esté trasladando fuera de la ciudad”, señaló.