Jeremy Meeks, el conocido como el preso más sexy del mundo, cambió el traje de reo por las prendas del diseñador Philipp Plein y ha subido a la pasarela en la Semana de la Moda de Nueva York, tan sólo 11 meses después de salir de prisión.
El ahora maniquí de 31 años ha exhibido una de las creaciones de hombre para la próxima temporada otoño-invierno del modisto alemán, en un desfile que ha estado ambientado por la voz del rapero Nas y la banda de “punk revival” e “indie rock”, “The Kills”.
El estilismo, un “total look” en negro, estaba compuesto por un plumas metálico y largo, con forro de pelo en el gorro, sudadera, pantalón y botas de estilo militar, con cámara de aire en la suela del talón.
Algunos famosos como Madonna, Kylie Jenner o Carine Roitfeld han sido testigos, en primera fila, de que el “diablo”, ahora, no se viste de Prada, sino de Philipp Plein.
Sin embargo, no es la primera vez que el ex convicto ha paseado su cuerpo trabajado en el gimnasio y subrayado por numerosos tatuajes de pandillero sobre la pasarela, pues el pasado de mes de junio ya lo hizo para promocionar el “merchandising” del equipo de la NBA, Golden State Warriors.
Jeremy Meek comenzó a hacerse famoso en 2014 cuando el Departamento de Policía de Stockton, en el norte del estado, publicó la fotografía de la ficha policial del joven californiano en su página de Facebook.
Una publicación que le granjeo el apodo del “delincuente más sexy” o “preso más guapo del mundo” en las Redes Sociales, donde la instantánea de Meeks, quien fue arrestado y condenado a 27 meses de cárcel por atraco a mano armada, se hizo viral, obteniendo 100 mil “me gusta” y 20 mil comentarios en tan solo dos días.
Cuando salió de prisión a comienzos de 2016, Meeks entró en conversaciones con agencias de modelos, como White Cross Management, empresa con la que trabaja a día de hoy, e, incluso, recibió propuestas para hacer películas, según aseguró su agente, Jim Jordan, al medio digital BuzzFeed.