Jeff Bezos comenzó su negocio de Amazon como una librería en la década de los 90, cuando era conocido en sus círculos como un joven brillante, pero “debilucho” por su físico delgado y “largucho”, por el cual nadie hubiera apostado.
Con el paso de los años se transformó en el jefazo de Amazon y se hizo uno de los tres hombres más ricos del mundo; con esta evolución su físico también cambió, adaptándose el estilo de vida que comenzó a tener con tanto dinero y mostrándose con una imagen exitosa y “bien parecida”.
El multimillonario logró un cuerpo atlético, del que presume ahora a sus casi 60 años, gracias a una serie de dietas y ejercicios especiales, además de hábitos diarios que lo muestran atractivo para algunos e inspirador para otros.
Su cambio radical comenzó a mostrarse a partir del 2017, cuando adoptó al ejercicio como su fiel compañero de todos los días para trabajar los músculos y cuando empezó a seguir dietas especiales con alimentos de su adquisición de $14 mil millones de dólares llamada Whole Foods, un supermercado enfocado en productos sanos.
Su cambio físico puede atribuírselo a su entrenador personal, Wes Okerson, quien es entrenador de acción de los actores Tom Cruise y Gerard Butler.
Según los informes, Bezos hace entrenamiento de resistencia y pesas de bajo impacto como el remo, pesas y ejercicios al aire libre con caminatas y carreras cuesta arriba en montañas, natación y viajes en kayak.
Se cree que Jeff comenzó a entrenar con Okerson en 2021, antes de un viaje a St. Barts que el millonario hizo con amigos.
A diferencia de otros millonarios que trabajan hasta tarde y levantarse súper temprano, Jeff apuesta por dormir al menos ocho horas seguidas todas las noches; la cantidad de horas recomendadas clínicamente para descansar bien, y cuidar el funcionamiento cognitivo, estado de ánimo y la salud mental.
En una conferencia que dio en el Club Económico de 2018, el multimillonario dijo: “Para mí, necesito ocho horas de sueño. Pienso mejor, tengo más energía, mi estado de ánimo es mejor”.
Agregó que dormir ocho horas seguidas le ayuda a tomar mejores decisiones, con la mente despejada y el mejor ánimo durante el día, en especial cuando se trata sobre el trabajo, sus empresas, su familia y sus inversiones.
Además del descanso nocturno, Jeff ocupa su tiempo en salir a divertirse, en hacer viajes de placer y en pasar tiempo de calidad con su familia y su promerica Lauren Sánchez.
El empresario complementa sus hábitos personales y fitness con una dieta rica en proteínas.
Okerson es conocido por añadir alimentos especiales a sus rutinas de entrenamiento, especialmente a través de dietas cetogénicas, ricas en grasas, proteínas y carbohidratos bajos.
Durante una asistencia a una conferencia en Sun Valley, de 2017, Bezos dijo que nunca en su vida había comido saludablemente con alimentos específicos, sino que siempre comía lo que le sabía bien, como botes llenos de galletas. “Nunca había leído una etiqueta de información nutricional en mi vida. Comía lo que me sabía bien”, señaló.
Su incursión en la comida sana probablemente fue después de la adquisición de Whole Foods, una cadena de alimentos sanos.
Según los informes, la dieta del tercer hombre más rico del mundo se basa en pulpo mediterráneo con papas, tocino y yogur de ajo verde para el desayuno.
Para la tarde, normalmente el empresario come huevos escalfados con más alimentos del mar, verduras de hoja verdes, frutas dulces y elementos de la gastronomía mediterránea; sólo a veces da gustos con chetos, que son sus preferidos.