Eiza González se prepara desfilar en la alfombra roja del estreno de la película Bloodshot este próximo 13 de marzo, proyecto en el que comparte créditos con Vin Diesel y Sam Heughan.
Y mientras llega la esperada fecha, la talentosa actriz se ha dejado ver numerosas veces en los principales barrios de Los Ángeles destilando belleza.
Una de ellas en un paseo rápido donde los paparazzis la captaron haciendo alarde de su tonificada figura envuelta en ropa deportiva.
La actriz mexicana desfiló por las aceras ataviada con leggings azules de cintura alta y franjas doradas sobre las piernas.
Foto: The Grosby Group
Complementó el outfit con un crop top amarillo limón de cuello halter sin mangas que ayudó a enmarcar sus abs de acero. Añadió zapatillas deportivas negras y un bolso de diseñador negro.
La joven de 30 años parecía llevar el rostro libre de maquillaje y su cabello bob peinado de lado con ligeras ondas.
Los paparazzis la fotografiaron absorta en su teléfono celular mientras caminaba cerca de una tienda de comestibles a la vez que trataba de cubrirse la cara con su cabello.
Eiza González recientemente dio una entrevista a la revista Nexos de American Airlines donde habla de la depresión que sufrió a los 12 años a raíz de la muerte de su padre.
Según sus declaraciones, solía comer compulsivamente y fue hasta que encontró un refugio en la actuación que superó las problemas alimenticios.
“Mi vida cambió de la noche a la mañana. Ha cambiado por completo”, dijo.
“Cuando estás abajo, siempre debes mirar el lado positivo de las cosas. Ese es el camino a la supervivencia en esta vida”.
“Entre los 15 y 20 años fue muy difícil para mí porque solía comer compulsivamente. Me tomó mucho tiempo descifrar que todo estaba sucediendo porque estaba deprimida después de la muerte de mi padre”, reveló.
Asimismo, dijo que le había tomado cinco años adoptar una vida más saludable, a superar su pérdida y a salir de la depresión.
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MA