La actriz Demi Moore cumple 62 años este 11 de noviembre. Es una de las estrellas más exitosas de Hollywood y durante décadas acaparó los reflectores, portadas de revista y películas por su radiante belleza.
A medida que pasaron los años, la estrella se alejó un poco de las pantallas. En 2019, la estrella reveló en sus memorias Inside Out que, a pesar de llegar a ser la actriz mejor pagada de Hollywood cuando protagonizó la película Striptease (1996), siempre estaba tratando de superar dudas e inseguridades arraigadas en su infancia.
“A lo largo de su ascenso a la fama y durante algunos de los momentos más cruciales de su vida, Demi luchó contra la adicción, los problemas de imagen corporal y el trauma infantil que la seguiría durante años, todo mientras hacía malabarismos con una carrera vertiginosa y, a veces, con una percepción pública negativa”, apunta la reseña de sus memorias.
Demi Moore enfrentó constantes presiones sociales y de fama que la llevaron a cuestionar sus roles como madre, actriz y mujer. Mantuvo una relación complicada con su madre, lidió con la vida en pareja y equilibró su éxito en el cine con la crianza de sus hijas.
Su imagen cambió drásticamente desde su papel en Ghost: la sombra del amor (1990) hasta Striptease (1996). Se sometió a una cirugía de aumento de senos y posó desnuda en la película, lo que le generó 12.5 millones de dólares, consolidándola como el sex symbol del momento.
Sin embargo, a medida que su éxito crecía, Demi se cuestionaba si realmente pertenecía a Hollywood, si era una buena madre, una buena actriz y, en general, si era lo suficientemente buena.
Aunque en varias ocasiones se habló de sus cirugías estéticas, ella siempre lo negó.
La película The Substance volvió a llevar a Demi Moore al centro de los reflectores. En ella interpreta a una instructora de aeróbics de televisión que, después de ser despedida, se entera de The Substance, un suero secreto que crea una versión separada y alternativa de ella misma (interpretada por Margaret Qualley) que le permitirá existir en un cuerpo más joven.
Sin embargo, la sustancia requiere que las dos personalidades alternen sus cuerpos y el personaje de Demi descubre que hay algunos efectos secundarios que revuelven el estómago cuando toma demasiada sustancia con la esperanza de vivir en un cuerpo más joven a largo plazo.
Demi Moore dijo que se sintió “conmovida” desde que leyó el guión de la película, pues sintió que era una manera de explorar este tema del envejecimiento que comienza a vivir en carne propia.
Señala que hay una presión de mantenerse como una mujer idealizada por el hombre. “En esencia, de lo que realmente se trata la película es de lo que nos hacemos a nosotros mismos, y me encantó que estuviera ilustrado de una manera tan física, mostrando esa violencia con lo que hacemos con nuestros pensamientos, cómo nos atacamos a nosotros mismos y distorsionamos las cosas”, dijo.
Demi Moore ha dicho a sus hijas que la única constante verdadera en la vida es el cambio. Y es un proceso de aceptación constante.
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