Hace unos días se estrenó la décima sexta temporada del reality más polémico de la televisión norteamericana: Keeping Up With The Kardashians, programa que relata el lujoso estilo de vida del clan Kardashian Jenner, sus conflictos, éxitos, aciertos y errores con los que lidian día a día.
La familia constituida por Kim, Khloé, Kourtney, Kendally Kylie Jenner, su madre Kris Jenner —y personalidades que las rodean como Scott Disick, Kanye West, Bruce/Caitlyn Jenner y Rob Kardashian — presume de sus excéntricos viajes vacacionales, pertenencias y de la fama que los ha colocado como estrellas mediáticas.
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Con el paso de los años, cada personaje ha marcado su camino en el show. Como Khloé, quien estuvo casada con el basquetbolista Lamar Odom. Tras su separación en 2013, la líder de Good American se sometió a una transformación física para bajar de peso y mejorar su imagen.
Hasta la fecha trabaja en ello, y con más intensidad después de haber dado a luz a su pequeña True, fruto del romance que vivió con el también jugador Tristan Thompson antes de que éste le fuera infiel dos veces.
Por su parte, la pequeña del clan, Kylie Jenner, creó su propio imperio con la empresa de cosméticos Kylie Cosmetics. Su éxito en redes sociales y entre sus millones de fans la colocaron como la joven más poderosa del mundo con una fortuna valorada en mil millones de dólares a sus 21 años.
En cuanto a una transformación física, Kylie dejó el cuerpo de una joven adolescente para adoptar el de una mujer madura después del nacimiento de su hija Stromi Webster. Adoptó el amor por el glamour. Sus caderas se ancharon, su rostro se afiló más y sus labios se engrosaron con ayuda de bótox.
Durante estos años, la más polémica de la familia, Kim, se casó dos veces; la primera con el jugador de baloncesto Kris Humphries de 2011 al 2013 y la segunda con el rapero Kanye West, con quien tiene tres hijos. Al inicio de esta temporada anunciaron la espera de su cuarto bebé.
La empresaria fundó su propia línea de maquillaje bajo el nombre de KKW Beauty, con la que aumentó su cuenta bancaria a más de 350 millones de dólares, además de ser la musa de diseñadores de lujo, influencer en redes sociales y socia en algunos proyectos familiares.
En tanto, Kendall se convirtió en la modelo mejor pagada de la industria fashionista, con pagos anuales que ascienden a los 22 millones de dólares.
Poco después de iniciar su carrera como modelo, Kendall obtuvo sus alas de ángel de Victoria’s Secret, se colocó como las favoritas de marcas de lujo como Versace, Chanel, Fendi y Clavin Klein.
Es embajadora de las tendencias de moda más populares como la braless, backless y transparecias que dejan a la vista su impactante figura, digna de las más grandes pasarelas.
En tanto, Kourtney, la mayor, vivió un tórrido romance con el empresario Scott Disick y padre de sus hijos Mason, Penélope y Reing.
Ha participado en los proyectos empresariales de su familia y hace unos días lanzó su propia marca dedicada al estilo de vida y cuidado personal, Poosh.
En las temporadas 14 y 15 lidió con las críticas de Kim debido a su supuesto desinterés por la familia, el trabajo e incluso por la forma de vestir, además de ser nombrada “la menos interesante de ver”.
En la galería te dejamos con el cambio físico que han vivido las hermanas durante estas 16 temporadas más allá de su fama, fortuna, romances o el estilo de vida que las caracteriza.