El concierto de los Guns N' Roses de ayer por la noche, el último en la Ciudad de México, concluyó con un espectáculo singular; el principal invitado fue una piñata del presidente electo de Estados Unidos y no es difícil imaginar que pasó con la figura.
Al finalizar el show musical, la agrupación dirigida por Axl Rose no dejó escapar la postura que tienen hacie el magnate republicano por lo que invitó al escenario del Palacio de los Deportes de la capital mexicana a un grupo de fans para apalear la figura de Trump.
“Vamos, suban a alguien, denle un palo y denle en la cabeza”, dijo el líder de la banda.
Los cuatro fans elegidos se encargaron de destrozar a golpes la piñata sin ningún reparo.
Axl Rose, Duff McKagan, Slash , Richard Fortus y Frank Ferrer tenían preparada otra sorpresa, pues al interior de la piñata había playeras de su agrupación que repartieron a sus fans.