En medio de la moda de los remakes y de las versiones “innovadoras” por las que está apostando Hollywood, ha surgido la historia de terror de La Cenicienta, que se estrenará a finales de este año.
De acuerdo con los informes, ChampDog Films adaptará a su manera el clásico de princesas de Disney así como lo hizo con Winnie The Pooh: Blood and Honey el año pasado, mostrando otra forma de ver a los personajes infantiles más dirigidos a los adultos.
La productora dio a conocer que está trabajando en una versión “espantosa”, “horrible” y bastante “sangrienta” de la película animada, que originalmente fue adaptada por Disney y llevada al cine en 1950.
Según informó el Daily Mail, la nueva Cenicienta se apegará más al cuento escrito por los hermanos Grimm en 1812 y agregarán los momentos oscuros que Disney omitió en un intento por llegar a la audiencia familiar.
La película fue titulada Cinderella’s Curse en inglés y La Maldición de Cenicienta en español. Louisa Warren, directora del proyecto, adelantó a Bloody Disgusting que la película está en producción y que llegará a la pantalla grande antes de que termine el 2023 con un “giro increíblemente único en la Cenicienta que todos amamos y conocemos”.
Y agregó: “Va a haber algunas muertes realmente horribles por sus manos”.
Los actores confirmados hasta ahora son Kelly Rian Sanson, Chrissie Wunna y Danielle Scott; Harry Boxley se encargó de reescribir la historia original de la princesa y darle su toque sangriento. Las grabaciones comenzarán en junio en Reino Unido.
Más allá de su historia original hecha a manos de los hermanos Grimm, La Cenicienta tiene su versión más memorable con Disney y la cinta animada que se estrenó en 1950.
En 1957, Julie Andrews protagonizó La Cenicienta de Rodgers & Hammerstein, que en realidad fue más un musical televisivo que una película en las pantallas grandes.
En 1998, Drew Barrymore encarnó a la princesa en la película Para Siempre, considerada la mejor versión de todas debido a que tiene un ambiente realista, su vestuario es más apegado a la historia de los Grimm, los escenarios y la música es “igual de bellos” protagonista y porque tiene a la mejor villana, interpretada por Anjelica Houston.
A estas versiones le siguió La Nueva Cenicienta, protagonizada por Hilary Duff y Chad Michael; esta película que adoptó la historia de la princesa en la edad moderna, donde su preocupación es ir a la universidad y liberarse de su madrastra, fue creada por Disney en 2004.
Quizá el live action más grande hasta ahora fue hecho también por Disney en 2015, con Lily James como la joven en desgracia que se convierte en princesa después de conocer al atractivo príncipe.
Cenicienta de 2021, protagonizada por Camilla Cabello, fue uno de los recientes fracasos que ha tenido el historial de adaptaciones. En su momento fue criticada por haber involucrado una larga lista de celebridades del momento en un proyecto con “musicales vergonzosos”, una historia predecible, “perdida en la modernidad”.
Cinderella’s Curse parece que convertirá la historia de Disney en algo más oscuro y dramático, así como sucedió con el éxito en taquilla Blood and Honey, de 2022, donde se mostró a Winnie Pooh como un asesino en serie acompañado de su amigo y cómplice Piglet.
ChampDog Films obtuvo los derechos de este clásico debido a que los derechos pasaron a ser dominio público, es decir, dejaron de pertenecerle sólo a Disney.
Cuando se anunció su nueva versión se creó gran expectativa entre los fans que crecieron con el clásico y la crítica especializada; sin embargo, recibió importantes señalamientos tras su estreno por distorsionar la historia del inocente oso y plasmarlo como un adicto asesino.