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Disney lanza este viernes un live action de una de sus películas más exitosas: Mulán. El estreno es a través de Disney +.
Este clásico de Disney está basado originalmente en el poema épico La balada de Mulán, protagonizada por la mítica guerrera china que Disney llevó a la pantalla grande en 1998.
Acompaña a Liu Yifei, la actriz responsable de interpretar a Mulán, en esta aventura de lucha y honor para defender su país y representar a su familia.
Conoce los detalles más curiosos sobre esta producción, la cual promete contener lo necesario para ser un éxito.
Los impresionantes sitios del rodaje
La mayor parte de la cinta fue filmada en Nueva Zelanda. Este país fue elegido por la producción de Mulán debido a los hermosos paisajes que posee. Aunque también se filmó en varios sitios de China, las locaciones de Nueva Zelanda le dieron un toque verdaderamente mágico.
Se dice que la producción reunió a un equipo de 800 a 900 personas en Mackenzie Country (Canterbury), Isla Sur. El valle del río Tasman fue ideal para filmar varias escenas de la película.
Los majestuosos acantilados de Arcilla de Omarama y el área de Poolburn también sirvieron de escenario. El trabajo de estudio se realizó en Kumeu Film Studios al noroeste de Auckland. La producción contrató a varias personas de origen asiático para que trabajaran como extras en el filme.
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Mulán no es una película musical
A diferencia de la cinta animada, este live action no contará con el repertorio musical del que gozaba la primera película de Mulán. La directora del proyecto, Niki Caro, considera que no hace falta ir a la guerra acompañada de música. Desea proyectar una visión más realista de la historia.
"Es una gran epopeya de artes marciales femenina. Será extremadamente físico, emocionante, entretenido y conmovedor", le dijo Caro a MovieFone durante una entrevista.
A pesar de que no será una película musical, todo la cinta cuenta con una banda sonora encabezada por la reconocida cantante Cristina Aguilera, quien interpretará dos fabulosos temas.
Una nueva villana hace de las suyas
Esta película tiene cambios que quizá le darán otro sentido a la historia. Uno de ellos es la elección de una nueva villana que interpretará a una malvada bruja, quién será una de las peores enemigas de Mulán.
La actriz encargada de interpretar este papel es Gong Li, una actriz de origen chino, conocida por su trabajo en la galardonada película The Story of Qiu Ju de 1992. Sus películas más recientes son Memoirs of a Geisha (2005) y Hannibal Rising (2007).
El nuevo amor de Mulán
En esta nueva versión de Mulán, no aparecerá el personaje de Li Shang como en la película animada. Conoceremos a un nuevo personaje: Chen Honghui. Será un miembro más de la unidad del comandante Tung que se vuelve cercano a Mulán. Este personaje es encarnado por el actor neozelandés Yoson An, según la revista Ellle.
El remake de Mulán tendrá una clasificación PG-13
Será la primera película en toda la historia de Disney que tendrá clasificación PG-13 porque se muestran batallas heroicas y asombrosas, dignas de una guerra, por lo que el contenido puede ser un tanto violento para ciertas audiencias.
La clasificación PG-13, impuesta por Estados Unidos, se refiere a que la película no es del todo apta para menores de 13 años. Se sugiere que si algún menor de 13 desea ver una cinta con esta clasificación, sea bajo la supervisión de un adulto.
El flamante equipo de producción
Niki Caro asumió la gran responsabilidad de hacer una película que lograra conquistar a la audiencia, sobre todo al público chino, el cual no quedo muy conforme con la película animada de 1998.
Por esta razón, logró hacerse de un excelente equipo de colaboradores, incluyendo al gran productor chino Bill Kong. Busca resaltar la cultura china.
"A medida que los proyectos se hacen más grandes, más segura estoy de que la autenticidad y la especificidad cultural es la única forma de abordar mi trabajo", subrayó Caro.
El equipo creativo de la directora, no sólo incluye a Kong, sino también a un grupo de historiadores chinos, entrenadores de dialectos que buscaron conservar en los actores el acento mandarín-estadounidense.
De acuerdo con la revista Vogue, en esta producción también intervinieron coreógrafos de acrobacias, así como 25 expertos en diseño, vestuario, maquillaje y arquitectura de la época.
Al tener todos estos elementos integrados, el proyecto se volvió muy costoso. Con 200 millones de dólares, se colocó como el live action más costoso de Disney.
El filme en su totalidad promete mucho: los escenarios son impresionante y la calidad del trabajo de los actores es excepcional. Así que ve preparando tus palomitas favoritas para disfrutar de esta gran producción.
