Tobe Hooper, el director que dinamitó el cine de terror en los años 70, murió este fin de semana, aparentemente de causas naturales.
En el verano de 1973, horrorizó al mundo con la película ‘Masacre en Texas’. Al contar la historia de un grupo de jóvenes atacado por una familia de caníbales, Hopper arrancó gritos entre las audiencias.
Aunque la película fue prohibida en algunos países por su contenido violento, también fue aplaudida por la crítica. ‘Masacre en Texas’ causó terror sin necesidad de grandes efectos especiales o monstruos increíbles.
La producción contó con un presupuesto de 140 mil dólares para su realización y recabó más de 30 millones. Cuatro décadas después, Leatherface, el hombre de la motosierra dispuesto a acabar con todo, aún impresiona.
El portal Mental Floss recupera algunos datos de terror de la película y muestra por qué sus imágenes realistas y tono desenfadado la catapultan como un clásico que no muestra signos de desvanecimiento.
Por ejemplo, ¿sabías que ‘Masacre en Texas’ fue inspirada durante la temporada de compras navideñas? Tobe Hooper cuenta que había grandes multitudes en Navidad y se sentía frustrado... cuando pasó junto a unas sierras de cadena.
“Entonces pensé: Conozco una manera de atravesar rápidamente esta multitud. Me fui a casa, me senté, pasé todos los canales sintonizados y toda la maldita historia vino a mí en lo que parecieron 30 segundos: la autopista, el hermano mayor en la gasolinería, la niña”, contó.