Las autoridades sanitarias de Guinea-Conakri confirmaron este lunes el posible caso en el sureste del país de fiebre hemorrágica de Marburgo, un virus similar al ébola, del que alertaron el pasado 6 de agosto.
"El caso probable de fiebre de Marburgo diagnosticado el martes 3 de agosto, ha sido reconfirmado por el Instituto Pasteur de Dakar (Senegal) el lunes 9 de agosto", lugar a donde se envió una muestra después de confirmarse en dos laboratorios nacionales, anunció en un comunicado el ministerio de Salud guineano.
El caso, que por el momento es calificado de "aislado" por las autoridades sanitarias de Guinea, fue detectado en la prefectura de Gueckédou, en la sureña región de Nzérékoré.
La fiebre de Marburgo es tan mortífera como el ébola y se estima que en África ha sido responsable de la muerte de más de 3,500 personas.
Es causada por el virus de Marburgo, de la familia filoviridae, la misma a la que pertenece el ébola.
Al igual que este, provoca hemorragias repentinas y puede producir la muerte en pocos días, con un período de incubación de 2 a 21 días y una tasa de mortalidad de entre el 24 % y el 88 %.
Los murciélagos de la fruta son los huéspedes naturales de este virus, que cuando es transmitido a los humanos puede ser contagiado mediante contacto directo con fluidos como la sangre, saliva, vómitos u orina.
La enfermedad, para la que no hay vacuna ni tratamiento específico, fue detectada en 1967 en la ciudad alemana de Marburgo -de ahí su nombre- por técnicos de laboratorio que resultaron infectados cuando investigaban a monos traídos de Uganda.
La sureña región de Nzérékoré ya fue a comienzos de 2021 la zona donde se originó el brote más reciente de ébola en Guinea, que terminó con 23 casos diagnosticados y 12 muertes.
También en Guinea, en una aldea de Gueckédou, se inició en diciembre de 2013 la peor epidemia de ébola de la historia, un brote que se desató en varios países de África occidental hasta 2016 y en el que hubo al menos 11.300 fallecimientos y 28.500 contagios, unas cifras que, según la OMS podrían ser conservadoras.