Varios videos recopilados y compartidos en redes sociales levantó la indignación entre los internautas por mostrar un grupo de empleadas de una guardería jugando una pesada y terrorífica a los pequeños.
El incidente ocurrió en la guardería de Lil’ Blessings Childcare en Hamilton, Mississippi, según los informes. Al parecer las empleadas usaron máscaras de Halloween para castigar a los niños “que eran malos”.
Tanto usuarios como los padres de los niños acusaron a la guardería de actos “espantosos contra los niños inocentes” por recurrir a dichas bromas para asustar a los niños y hacerlos portarse bien.
En uno de los videos se escucha a una mujer decirle a otra con máscara que evite asustar a los “niños que han sido buenos”.
“¿Estás siendo malo?”, pregunta la mujer enmascarada a un menor. “No”, contesta. Será mejor que seas bueno”, grita la mujer.
En otras tomas se ve a la empleada enmascarada gritándole en la cara a los niños y haciéndolos llorar al instante de miedo y desconcierto al ver que nadie los cuida ni consuela.
Las escenas se repiten en varias aulas de la guardería, con trabajadoras enmascaradas persiguiendo a los pequeños llorando aterrados y tratando de huir.
De un momento a otro, algunos niños asustados tratan de esconderse en los estantes del salón mientras la mujer finge derribar la puerta, luego persigue a los niños gritándoles.
La recopilación de los videos fue compartida inicialmente en Facebook por la misma persona que los grabó, otra empleada que sólo quería evidenciar a sus compañeras ante los padres de las víctimas. Debido a las crítcas y acusaciones de abuso infantil, la publicación fue eliminada.
“Hace un par de semanas, algunas compañeras en la guardería compraron máscaras de Halloween para asustar a los niños, lo hicieron y nunca lo grabé en video. Cuando escuché que lo iba a hacer de nuevo, grabé para obtener la prueba y luego envié el video a los padres para mostrarles cómo estaban tratando a sus hijos”, dijo la empleada.
Y continuó defendiéndose: “No grabé esto por mierda y risitas. No fue divertido para mí. No me divertí con esto. El que grita en las caras de los niños NO soy yo. El que está al lado de la chica que grita NO soy yo. Esa risa en el video NO soy yo”.
Jennifer Kayla Newman, como se identificó a la empleada que grabó las pruebas de abuso infantil, declaró en la publicación que antes de este incidente ya habían existido otros más por parte de sus compañeras donde asustaban y hacían llorar a los niños.
Según su publicación, no había podido acusar a sus compañeras debido a que no tenía pruebas, hasta ahora.
Tras los reclamos de los padres de familia, las autoridades de la guardería se encargaron de despedir a las maestras culpables, asimismo, iniciaron una investigación en conjunto con el Departamento de Salud del Estado de Mississippi y la Oficina del Sheriff del Condado Monroe para aplicar castigos más efectivos.
“Las personas que hicieron esos actos ya no están con nosotros. Fueron despedidas. Yo no estaba aquí en ese momento y no sabía que estaban haciendo eso. No apruebo eso y nunca lo he hecho. Sólo quiero decir que se ha cuidado”, dijo Sheila Sanders, dueña de la guardería en un comunicado.