Un hombre de la región de Albuquerque, en Nuevo México, decidió rescatar a un perro que estaba abandonado al interior de un automóvil, en un día caluroso.
El sujeto, identificado como Gerasimos Klonis, escuchó los ladridos a la mascota luego de salir de un restaurante con su novia. Al voltear hacia el carro, vio al animal luchando por sacar su hocico en un pequeño espacio en la ventana, para poder respirar.
La pareja llamó al número de emergencias 911 para solicitar ayuda para el animal. Sin embargo, pasaron 30 minutos y nadie llegaba al auxilio.
Al notar que el perro se veía decaído por el calor, decidieron rescatarlo ellos mismos. Gerasimos tomó un tubo y rompió la ventana para salvar al perro.
Su novia filmó el momento del rescate, para tener evidencia de que había quebrado el cristal para salvar al perro.
El animal salió del automóvil inmediatamente y Klonis le dio una botella con agua para que se hidratara. Mientras realizaba esto, el dueño del vehículo regresó al estacionamiento, al escuchar la alarma.
“¿Este es tu perro? No estaba pasando un buen momento en el auto”, exclamó Gerasimos al propietario.
Tras el incidente, Gerasimos Klonis tuvo que ser suturado con dos puntos en la mano y ser vacunado contra el tétanos, de acuerdo con KOB 4.
Cuando llegó la policía, el dueño indicó que el perro era un animal de servicio, pero lo había dejado en el carro porque no sabía si lo admitirían en el restaurante. No obstante, el hombre fue acusado de crueldad animal.
De acuerdo con la organización animal PETA, los automóviles pueden ser una trampa mortal para los perros, ya que en días con temperaturas de 25 grados Celsius, el calor puede llegar a los 37 grados, en menos de 10 minutos, en un carro estacionado.
Los perros que sufren de un golpe de calor en un auto presentan síntomas como sed excesiva, jadeo intenso, vómito, inquietud, saliva espesa, diarrea con sangre y falta de coordinación.