A través de redes sociales, usuarios viralizaron el impactante momento en el que un avión es golpeado por un rayo durante un vuelo que se dirigía a Londres desde Vancouver, Canadá.
Según los primeros reportes, se trató del avión Boeing 777 de la aerolínea Air Canadá, que fue interceptado por una lluvia eléctrica por la noche del 3 de marzo de 2024 y que causó furor entre los pasajeros y transeúntes que presenciaron el estruendo.
En el video se puede observar como un rayo atraviesa las nubes hasta llegar a la aeronave y al impactar sobre ella, alumbra el cielo en tonalidades azules. Pese a las sorprendentes imágenes, no se reportaron heridos y el avión continúo su marcha hacia el Aeropuerto Internacional de Londres Heathrow con normalidad.
De acuerdo con CTV News, el instante fue captado por el estudiante de 19 años, Ethan West, quien se considera un apasionado por el mundo de la aviación y grabó el momento porque el ejemplar que transitaba por el cielo es su favorito.
"Es uno de mis aviones favoritos (...) hace un ruido muy fuerte, así que estaba tratando de captarlo del impulso del despegue", detalló en entrevista para medios locales.
El capitán ‘Mich’ de Volaris, asegura que aunque las tormentas eléctricas se tratan de evitar durante el viaje, en caso de que un avión sea impactado por un rayo no hay riesgo para los tripulantes.
‘’Si algún rayo llegara a tocar el avión, no pasa nada. Realmente, los aviones, como los edificios, como algunas estructuras, tienen pararrayos''.
Además, detalla que los aviones cuentan con los mecanismos necesarios para dispersar la energía de los rayos.
‘’En este caso, nosotros en el avión tenemos estos aditamentos para poder disipar toda esa energía del rayo que impacta en el avión. Todo esto lo expulsa y lo saca por medio de los pararrayos, podría decirse, a la atmósfera’’.
Mientras que el piloto, conocido en redes sociales como ‘Piloto_piles’, establece que aunque el fenómeno resulta extraño, no es poco frecuente.
‘’Se calcula que cada avión recibe mínimo un impacto de rayo al año. El motivo por el que el rayo no es capaz de derribar un avión es porque el fuselaje de aluminio actúa como una jaula de Faraday’’.