Un grupo de empleados de 13 restaurantes de McDonald’s en Chicago presentó una demanda el jueves en la que dice que la búsqueda de ganancias por parte de la compañía pone a los trabajadores en “peligro diario” de ataques físicos por comensales violentos.
En la demanda presentada en la corte del condado Cook, los 17 trabajadores dicen que McDonald’s no les ha protegido de lo que llaman un patrón de violencia “a nivel de la ciudad y nacional” y que la policía responde a más de 20 llamadas de emergencia diarias en los restaurantes de la cadena en Chicago.
Citan varios ejemplos de violencia, incluyendo un incidente en el que un comensal golpeó a un empleado con un cartel y otro en el que un comensal orinó sobre un empleado.
McDonald’s no respondió directamente a las acusaciones de la demanda, pero dijo en una declaración que “se toma seriamente su responsabilidad de proveer y fomentar un ambiente de trabajo seguro para nuestros empleados y, junto con nuestras franquicias, continúa invirtiendo en programas de entrenamiento que propugnan por un ambiente seguro para empleados y comensales”.