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El anuncio este martes del legendario mariscal de campo Tom Brady de dejar a los Patriots de Nueva Inglaterra confirmó los rumores de la falta de acuerdo que había tenido con el dueño del equipo, Robert Kraft, y el entrenador, Bill Bellichick, al pedir mayor control en la dirección deportiva y más dinero.
Nada más conocerse la marcha de Brady, Kraft declaró a la cadena de televisión ESPN que la pasada noche había hablado con el veterano mariscal de campo sobre la decisión de su futuro profesional.
"Tommy (Brady) se comunicó anoche conmigo", admitió Kraft. "Tuvimos una conversación positiva y respetuosa. No es la forma en que quiero que termine, pero deseo que haga lo que sea en su mejor interés personal. Después de 20 años con nosotros, se ha ganado ese derecho. Lo amo como a un hijo".
Brady anunció este martes, en un extenso mensaje a través de Instagram, que su recorrido dentro del fútbol americano lo llevaría a otra parte, ya que su contrato con los Patriots concluirá mañana, miércoles.
Según la NFL Network, Kraft estaba dispuesto a dejar que Brady explorara otras opciones como agente libre por primera vez en su carrera antes de regresar potencialmente a Nueva Inglaterra.
Los Patriots querían ver si algún equipo estaba dispuesto a ofrecerle un gran contrato, lo que les permitiría negociar con Brady o dejarlo irse.
Brady no les ha dejado esa oportunidad porque durante las negociaciones, en las que también participó Belichick, para evitar que se convirtiese en agente libre, ya les dejó muy claro que sus demandas no eran solo de tipo económico sino de poder.
Por primera vez desde que llegó a los Patriots en el 2001, Kraft no pudo cumplir con las exigencias que Brady puso sobre la mesa como eran el tener el control sobre la formación de la plantilla y además tomar también las decisiones en las jugadas cuando estuviese en el campo, algo que nunca antes ningún agente libre había pedido.
Además, de acuerdo a varias fuentes periodísticas, Brady también quería un contrato por dos años y más de los 13,5 millones de dólares que recibió la pasada temporada, algo que los Patriots tampoco aceptaron al ofrecerle solo un año y con menos dinero.
La respuesta de Brady no se hizo esperar con el mensaje en el que anunciaba su marcha de los Patriots y la salida de Massachusetts, el estado que consideró como su hogar durante los últimos 20 años.
"Realmente han sido las dos décadas más felices que podría haber imaginado en mi vida y no tengo nada más que amor y gratitud por mi tiempo en Nueva Inglaterra. Mis hijos nacieron y se criaron aquí y siempre abrazaste a este chico de California como tuyo".
Brady también agradeció a Kraft y a Belichick por su "compromiso diario para triunfar y crear una cultura ganadora basada en grandes valores".
Pero en el largo adiós y despedida de los Patriots, Brady no reveló con qué equipo estaría firmando una vez que ingrese al mercado de la agencia libre a partir de mañana, miércoles.
Mientras que se limitó a decir que "no sé lo que depara mi futuro dentro del fútbol americano, pero es hora de que abra una nueva etapa en mi vida y carrera profesional".
La salida de Brady de los Patriots, de acuerdo a la cadena de televisión NFL Networks, sitúa a los Chargers como la elección ideal para el exmariscal de campo de Nueva Inglaterra.
También los Buccaneers de Tampa Bay mostraron todo el interés por conseguir los servicios de Brady si dejaba los Patriots, tanto en sus deseos de poder dentro del equipo como de ganar más dinero.
Según los informes, los Buccaneers hicieron un movimiento agresivo sobre Brady, ofreciéndole un contrato de 30 millones de dólares "o más" por un período de tiempo desconocido, informó este martes Ian Rapoport de NFL Network.
Los Buccaneers también buscan reemplazar al mariscal de campo Jameis Winston, quien se convierte en agente libre esta semana después de una temporada difícil.
Al margen de cual sea la decisión final que tome Brady, lo que ya tiene garantizado es que a partir de este miércoles será el jugador, que a pesar de tener 42 años, genere el mayor interés dentro del mercado de los agentes libres de la NFL. EFE