El gobierno de Estados Unidos estudiará esta semana una "propuesta" de alianza entre el grupo chino ByteDance y la norteamericana Oracle, para tratar de resolver el diferendo sobre la popular plataforma de videos TikTok, que Donald Trump quiere cerrar si no pasa a manos de una firma estadounidense.
"Recibimos una propuesta durante el fin de semana que incluye a Oracle como socio tecnológico de confianza, con muchas recomendaciones en materia de seguridad nacional", dijo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, en CNBC.
Mnuchin no dio detalles respecto a qué forma tendría la alianza entre Bytedance y Oracle, especializado en software y servicios para empresas.
Oracle confirmó haber presentado una propuesta pero no reveló su contenido.
En tanto una portavoz de TikTok dijo que la idea "podría resolver los problemas de seguridad" que inquietan al gobierno de Trump.
"Esta propuesta nos permitiría seguir sosteniendo a nuestra comunidad de 100 millones de personas de Estados Unidos que gusta de TikTok (...) así como a los cientos de miles de propietarios y creadores de pequeñas empresas que cuentan con TikTok para desarrollarse", añadió.
Trump, quien acusa desde hace meses a la popular red social de supuesto espionaje en favor de China, firmó decretos para forzar a ByteDance a vender rápidamente las actividades de TikTok en suelo estadounidense.
"Vamos a analizarla en el comité Cfius (de inversión extranjera, ndlr) esta semana, luego le haremos una recomendación al presidente y la revisaremos con él", dijo el secretario del Tesoro.
Agregó que también mantendrán conversaciones "con Oracle durante los próximos días" respecto a la seguridad de los datos.
"No quiero entrar en los detalles de la negociación, solo diré que un factor que siempre ha sido fundamental para nosotros es la seguridad nacional, garantizar que la tecnología en los teléfonos estadounidenses sea segura", insistió Mnuchin, quien mencionó "una gran confianza en Microsoft y Oracle".
Una fuente conocedora del caso indicó a The Wall Street Journal que el acuerdo no será "probablemente estructurado como una venta", mientras que algunos medios que citan fuentes chinas hablan este lunes de una "sociedad tecnológica privilegiada" y no de una venta de las actividades estadounidenses de TikTok.
CNBC también evocó la posibilidad de que Oracle tome una participación minoritaria en el capital de TikTok.
Queda por saber si este tipo de alianza dejaría satisfecho a Trump.
El tiempo corre porque la fecha límite pasó del 15 de septiembre al 20, es decir al próximo domingo.
TikTok ya se querelló en la justicia contra el gobierno estadounidense en el marco de este caso.
La cotización de las acciones de Oracle fue suspendida poco después de la apertura en Wall Street este lunes. Luego de restablecida, terminó con una suba de 4,32% al cierre.
Microsoft estaba interesada en comprar las operaciones de TikTok en Estados Unidos. El grupo de supermercados Walmart, otro gigante, se había aliado con Microsoft en este intento de adquisición que fue rechazado el domingo por ByteDance.
"Pensamos que Microsoft quería comprar TikTok únicamente con su algoritmo principal, una condición en la que el gobierno chino y ByteDance no querían ceder", aseguró en una nota Daniel Ives, analista de Wedbush Securites.
A fines de agosto, el Ministerio chino de Comercio enmendó su lista de tecnologías con limitaciones o prohibiciones de exportación, que incluye ahora tecnologías de inteligencia artificial como las que han hecho exitosa a TikTok, una plataforma en la cual se muestran videos a los usuarios más en función de sus gustos que de sus contactos.
ByteDance hizo saber que "respetará estrictamente" las nuevas reglas de Pekín, es decir la obtención de una licencia de exportación por parte de las autoridades chinas.
En agosto, la aplicación superó las 2.000 millones de descargas en el mundo y afirma estar presente en más de 200 países. En Estados Unidos, la red social dice tener 100 millones de usuarios mensuales.
La guerra por TikTok llega en el marco de un deterioro más amplio de las relaciones entre las dos principales economías mundiales desde hace meses, con Estados Unidos y China lanzándose duras recriminaciones en el campo comercial, de los derechos humanos o por la responsabilidad sobre la pandemia del coronavirus.