Los nuevos pedidos de subsidio por desempleo subieron en 137.000 la semana pasada en Estados Unidos, según datos del gobierno publicados el jueves, mientras las nuevas ayudas federales se hacen esperar.

El incremento de solicitantes fue mucho mayor de lo que esperaban los economistas y genera más presión sobre los legisladores para que rompan el estancamiento respecto de un nuevo paquete de fondos federales para ayudar a las familias y empresas afectadas por la crisis económica derivada de la pandemia. 

Las negociaciones transcurren desde hace meses, aunque no ha habido acuerdo. En días recientes surgieron nuevas propuestas que aún no han obtenido el apoyo de todas las partes.

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Con millones de trabajadores desempleados que dejarán de percibir ayudas justo después de Navidad, demócratas y republicanos coinciden en que el Congreso no puede permitirse dejar de sesionar sin antes haber alcanzado una solución positiva.

Entre el 29 de noviembre al 5 de diciembre, un total 853.000 personas solicitaron por primera vez asistencia por desempleo, lo que implica un alza de 137.000.

El dato refleja el alto nivel de despidos en paralelo con un fuerte avance de la pandemia en Estados Unidos, el país del mundo con más muertos por el covid-19.

El promedio de las previsiones de los expertos estaba en el entorno de 720.000 nuevas inscripciones.

"Los pedidos revirtieron la tendencia de la semana pasada y subieron al nivel más alto desde septiembre", explicó la economista jefe para Estados Unidos de la consultora HFE, Rubeela Farooqi.

La analista explicó que probablemente los datos de la semana pasada sufrieron una distorsión por la festividad del Día de Acción de Gracias y que las estadísticas recientes reflejan mejor la tendencia de un deterioro de la situación.

Farooqi indicó además que es probable que la crisis sanitaria empeore y que la implementación de medidas para controlar la propagación del virus probablemente restrinja la actividad económica.

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En la semana terminada el 21 de noviembre, el total de trabajadores que recibieron alguna forma de asistencia, incluyendo dos programas de emergencia por la pandemia, cayeron en 1,1 millones, hasta 19 millones de beneficiarios.

Varias ayudas extraordinarias que reciben personas que en situaciones normales no calificarían para el seguro de desempleo expiran a final de año, salvo que el Congreso logre un acuerdo entre demócratas y republicanos para impulsar un nuevo paquete.

La creación de empleos en noviembre fue decepcionante y casi 11 millones de personas permanecen desempleadas desde el comienzo de la pandemia.

Los economistas advierten que diciembre podría empeorar las cosas.

"Dado que los casos de covid-19 y las muertes ahora alcanzan nuevos máximos regularmente, estos informes cuestionan el crecimiento del empleo en diciembre, especialmente dada la rápida desaceleración del crecimiento en noviembre", dijo Robert Frick, de Navy Federal Credit Union. 

El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, dio a conocer el martes una propuesta de ayuda por 916.000 millones de dólares, que contempla la extensión de beneficios por desempleo, ayudas para los gobiernos estatales y locales en dificultades, protecciones de responsabilidad para empresas y cheques de 600 dólares para todos los contribuyentes.

Sin embargo, los líderes demócratas dicen que el plan de la Casa Blanca se queda corto y, en cambio, siguen empecinados en uno de 908.000 millones de dólares presentado la semana pasada por legisladores demócratas y republicanos.

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