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Hermanos, compañeros de club y, ahora, rivales en el Mundial.
Iñaki y Nico Williams, atacantes del Athletic Bilbao, conformarán la más reciente dupla de hermanos que compita con países distintos en la Copa del Mundo, Qatar 2022.
Iñaki fue convocado por Ghana el lunes y Nico, su hermano menor, ya había sido citado por España la semana pasada.
Emularán la gesta de los hermanos Boateng, que representaron a países diferentes en Sudáfrica 2010 y luego en Brasil 2012. Jerome fue un defensor central con Alemania y Kevin-Prince, el mayor, jugó de volante ofensivo con Ghana.
Los Boateng, que se toparon de frente en ambos torneos, nacieron de padre ghanés y se criaron con madres separadas en Alemania. Los Williams nacieron en España de padres ghaneses, que escaparon a Europa en busca de una mejor vida.
En una odisea para llegar a España, los padres se subieron a un camión atestado y atravesaron a pie el desierto del Sahara, según Iñaki Williams. Su madre ya estaba embarazada de él cuando la pareja fue detenida al tratar de entrar a España. Recibieron asilo político al seguir el consejo de un abogado de Caritas para que dijeran que escapaban de la guerra civil en Liberia.
La pareja se mudó al País Vasco, donde ambos chicos nacieron. No pasó mucho tiempo antes que Iñaki Williams, ahora de 28 años, se enrolara en la academia del Athletic, histórico club de primera división. Nico, de 20 años, hizo lo propio.
"Siempre digo que los dos hacemos todo esto por nuestros padres, por todo lo que ellos han hecho por nosotros", dijo Iñaki al diario deportivo Marca. “Es como devolverles de alguna manera su sacrifico. Que vean que sus hijos están cumpliendo sus sueños”.
Los hermanos han sido dos de los pocos jugadores de raza negra que han competido por el Athletic, el club que únicamente ficha a futbolistas nacidos en el País Vasco o que han surgido de las academias de la región en el norte de España.
Iñaki Williams rompió un récord de la Liga española la pasada campaña al encadenar 203 partidos consecutivos. La selección de España no lo tomaba en cuenta desde disputó un amistoso en 2016, por lo que se decidió por el ofrecimiento de Ghana cuando la nación africana empezó a buscar agresivamente a jugadores previo al Mundial de Qatar.
El delantero debutó con Ghana en un amistoso contra Nicaragua, y luego en el fogueo ante Brasil.
Nico Williams, quien fue criado en cierta forma por Iñaki porque sus padres tenía que salir a trabajar, entró inesperadamente en la lista confeccionada por el técnico de España Luis Enrique. Recién en septiembre había hecho su debut con la selección, en un partido contra Suiza por la Liga de las Naciones. En su segundo partido y tras salir de la banca, el juvenil asistió en el gol de Álvaro Morata que instaló a España en las semifinales del torneo.
OTROS HERMANOS QUE TERMINAN DE RIVALES EN EL MUNDIAL
Se han dado varios casos de hermanos con la misma selección, incluyendo los tres hermanos Palacios con Honduras en la cita de 2010.
Ghana llevó a los hermanos Andre y Jordan Ayew — hijo de Abedi Pele, tres veces proclamado como el mejor jugador de África — en el Mundial de 2014, y volverán a Qatar este mes.
Costa de Marfil contó con Yaya y Kolo Touré en 2010 y en 2014, mientras que Jonathan y Giovani dos Santos representaron a México en 2018, al igual que Eden y Thorgan Hazard por Bélgica.
Los hermanos Frank y Ronald de Boer jugaron para Holanda en los mundiales de 1994 y 1998, alcanzando las semifinales en 1998. Otra dupla de mellizos neerlandeses — Rene y Willy van de Kerkhof — alcanzaron la final dos veces, en 1974 y 1978, sucumbiendo en ambas ocasiones. Erwin y Ronald Koeman no eran mellizos pero en 1990 acudieron con Holanda.
Dinamarca contó con Brian y Michael Laudrup en el torneo de 1998, en tanto que Inglaterra acudió con Jack y Bobby Charlton en las copas de 1966 y 1970.
España y Ghana quedaron en grupos distintos en Qatar, así que los hermanos no podrán cruzarse en unos hipotéticos cuartos de final.
“Ojalá se repita con nosotros... y caiga del lado de Ghana”, dijo Iñaki Williams.
“Ya veremos eso”, señaló Nico. “Eso sí, nos cambiaríamos la camiseta”.
