Varios manifestantes pidieron este miércoles en Chicago, Illinois, frenar la deportación de un salvadoreño sin residencia legal que de abandonar Estados Unidos dejaría a una hija enferma de leucemia y llegaría a un país donde su vida "corre riesgo".
Cristian Avalos-Merino fue arrestado el 14 de mayo en el poblado de Cicero, Illinois, mientras dormía en su auto estacionado.
Días después, durante una audiencia, el salvadoreño de 38 años supo que los agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) lo esperaban para arrestarlo porque había tenido una deportación previa, según indicó Ray Hanania, portavoz policial de la localidad.
Desde esta fecha, Avalos-Merino está detenido en la cárcel del Condado McHenry, en Illinois.
Fue durante este tiempo de detención que las vidas de la familia del salvadoreño, Nora Quiñones, su esposa, y sus dos hijas nacidas en Estados Unidos, Micaela, de tres años, y Kamila, de 18 meses, también tomaron un giro difícil: a Kamila se le diagnosticó una leucemia.
Quiñones, quien llevó a cabo una huelga de hambre de ocho días en junio para llamar la atención sobre el caso de su esposo, tardó incluso en comunicarle al padre de la niña el diagnóstico sobre Kamila, por precaución, según se pudo conocer.
"Por eso tenemos hoy esta protesta, para que ICE use su discreción y ponga en libertad a Avalos", dijo a EFE Irene Rómulo, voluntaria de Comunidades Organizadas Contra las Deportaciones (COCD).
Rómulo se presentó hoy junto a otros líderes de varias organizaciones hispanas frente a las oficinas de ICE en el centro de Chicago para pedir una revisión de este controvertido caso.
La organizadora indicó que el inmigrante, quien tenía una deportación previa del año 2008 cuando huyó de su país, encara serios riesgos de muerte si es devuelto a El Salvador.
En su país, personas desconocidas persiguieron a Avalos para atacarlo con un machete, pero logró escapar, de acuerdo con la activista.
Luego, otros desconocidos mataron al mejor amigo de Avalos cuando lo confundieron con él, anotó Rómulo.
"Esa fue la razón por la que dejó su país; recibió amenazas y su vida allá corre riesgo si lo deportan", relata la miembro de COCD.
La niña pequeña de Avalos recibe quimioterapia dos veces a la semana y la madre es la única que está a cargo de la familia en medio de esta precaria situación.
Los activistas se proponen durante esta jornada presentar la información de la pequeña para que ICE considere dejar a su padre en el país.
También han abierto una página en GoFundMe con la idea de recaudar 3.000 dólares como donativos.
"Es un caso muy triste y a la vez emblemático del terror que ICE transmite a todos los inmigrantes en el país," sostuvo Rómulo