Unos padres acusados de la muerte de su hija de 12 años, quien durante años padeció una infestación crónica de piojos, podrían salir bajo fianza porque los fiscales aún no han pedido que los acuse un jurado de instrucción.
Mary Katherine “Katie” Horton y John Joseph “Joey” Yozviak pueden quedar en libertad previo pago de una fianza de 100.000 dólares cada uno. Ambos permanecían el martes en la cárcel del condado de Wilkinson, en el estado de Georgia.
Yozviak y Horton están acusados de crueldad hacia un menor y homicidio simple. Los investigadores dijeron en septiembre que la causa de muerte de la niña Kaitlyn Yozviak pudo ser indirectamente una infestación de piojos que duró años.
El fiscal Brent Cochran dijo a WMAZ-TV que aún aguardan los resultados de la autopsia y pruebas médicas.
Cochran no dijo cuándo espera los resultados ni cuándo llevaría el caso a un jurado de instrucción.
El agente Ryan Hilton de la oficina de investigaciones de Georgia dijo que de acuerdo con la historia clínica, Kaitlyn murió de un paro cardíaco acompañado por anemia grave.
Hilton declaró que en el momento de su muerte, Kaitlyn padecía la infestación de piojos “más grave” que su oficina hubiera visto, y que podría haber durado al menos tres años. Dijo que en su opinión las picaduras constantes de los piojos redujeron sus niveles de hierro en sangre, lo que provocó la anemia y detonó el ataque cardíaco.