A partir de este jueves, el Congreso de Estados Unidos cerrará al público el Capitolio y los edificios de la Cámara de Representantes y del Senado hasta abril, a fin de evitar la propagación del coronavirus.
La oficina administrativa del Congreso indicó que sí estará permitida la entrada de legisladores, subalternos, periodistas y visitantes oficiales.
Se trata de “una medida de extrema precaución”, dijeron las autoridades en un comunicado.
En un correo electrónico a los legisladores, los administradores del recinto indicaron que el Congreso dejará de aceptar recorridos, incluso las visitas especiales guiadas por los legisladores y sus subalternos. No habrá visitas al Centro de Visitantes del Capitolio, una enorme estructura subterránea inaugurada en el 2008 y que ha recibido a unos 21 millones de visitantes desde el 2018.
Los funcionarios expresaron que estaban actuando siguiendo los consejos de los expertos del Distrito de Columbia e incluso de los propios médicos del Congreso.
El Congreso tiene receso la semana entrante.
Si bien no había registros de inmediato sobre otros casos en que el Capitolio ha cerrado, ese tipo de medidas es sumamente inusual.
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