La bofetada que Will Smith le propinó a Chris Rock en la gala de los premios Óscar este domingo dejó a todo el mundo boquiabierto y quedará para la historia de Hollywood.
El escándalo lo desató una broma de Rock sobre la cabeza rapada de Jada Pinkett, la esposa de Will Smith, que padece alopecia, nombre médico para la severa pérdida de cabello. Smith se dirigió al escenario y le dio una bofetada. "¡Mantén el nombre de mi esposa fuera de tu puta boca!", le gritó dos veces tras volver a su asiento.
Smith, quien saltó a la fama en la serie de la década de 1990 "El príncipe del rap", tiene un historial de roces con Rock que se remonta a varios años, desde que el comediante se metió con Pinkett Smith por el boicot que la pareja le hizo a los Óscar de 2016.
Pero el rapero y productor Sean "Diddy" Combs indicó que la pelea del domingo duró poco y le dijo a la publicación Page Six: "Ya no hay problema (entre ellos), se acabó, puedo confirmarlo".
El actor apareció tarde en la noche en la fiesta de los Óscar de Vanity Fair, y junto a su esposa e hijos posó para fotos y bailó en la pista.
Pinkett Smith no se pronunció en las redes, pero su esposo bromeó en su propio post en Instagram añadiendo: "¡No puedes invitar a la gente de Filadelfia o Baltimore a ningún lugar!", aludiendo a sus ciudades natales.
En las últimas horas algunas voces salieron en defensa de Smith. Liam Payne, excantante de One Direction, dijo a periodistas: "Creo que tenía derecho a hacer lo que hizo".
La representante demócrata Ayanna Pressley, quien padece de alopecia, le agradeció a Smith. "Felicitaciones a todos los maridos que defienden de la ignorancia e insultos cotidianos a sus esposas que sufren de alopecia", tuiteó Pressley y luego borró el mensaje.
El también representante demócrata Jamaal Bowman también recurrió a Twitter y también eliminó lo escrito: "Una lección a sacar: no bromear con el cabello de una mujer negra".