La OMS recomendó este miércoles seguir utilizando la vacuna AstraZeneca contra el coronavirus pese a temores de posibles efectos secundarios que llevaron a suspenderla en varios países.
"Por el momento, la OMS estima que el balance riesgos/beneficios se inclina a favor de la vacuna AstraZeneca y recomienda que las vacunaciones continúen", indicó en un comunicado.
Mientras que varios países europeos, entre ellos Francia y Alemania, decidieron suspender cautelarmente sus campañas de vacunación con el fármaco sueco-británico, otros como Gran Bretaña o India salieron a la palestra para defenderlo.
El primer ministro británico, Boris Johnson, afirmó que se la pondrá personalmente "muy pronto".
Cerca de la mitad de la población del Reino Unido, 25,2 millones de personas, ya ha recibido la primera dosis de vacunación, y unos 11 millones fueron dosis de AstraZeneca/Oxford.
El primer ministro francés, Jean Castex, también se mostró dispuesto a vacunarse "muy rápidamente" en cuanto la vacuna vuelva a ser autorizada en el país, mientras que su gobierno no descartaba un nuevo confinamiento en París y sus alrededores.
Las diferentes variedades del coronavirus, en especial la británica, muy contagiosa, están circulando de forma acelerada en toda Europa.
Polonia iniciará un confinamiento parcial de tres semanas a partir del sábado.
India por su parte declaró que apoya "con todo vigor" a la vacuna de AstraZeneca, y pidió al mismo tiempo a la población disciplina en las restricciones para impedir una segunda oleada del coronavirus, que obligaría a nuevos sacrificios.
Además de su apoyo al laboratorio AstraZeneca, la OMS también recomendó el miércoles la vacuna estadounidense Johnson & Johnson, incluso en los países donde circulan las cepas más contagiosas.
Diez países europeos (Alemania, Francia, Italia, Eslovenia, España, Portugal, Letonia Suecia, Luxemburgo y Chipre) se sumaron a Dinamarca, Noruega e Islandia en la lista de los que han suspendido la vacuna sueco britanica por problemas de coagulación.
España anunció que está investigando tres casos de trombosis, uno de los cuales acabó en el fallecimiento del paciente.
Como contrapartida, Australia solicitó a AstraZeneca y a la UE el acceso de emergencia a un millón de dosis que compró para abastecer a Papúa Nueva Guinea, que se enfrenta a un brote.
Italia había bloqueado a principios de marzo un envío de vacunas de AstraZeneca producidas en Europa a Australia.
Mientras, otros países trazan su propio camino hacia la inmunización. Cuba espera contar "a más tardar" en agosto con los millones de dosis de la vacuna anticovid que necesita para inmunizar a "toda" su población.
"A más tardar, en el mes de agosto habremos fabricado las dosis requeridas para inmunizar a toda nuestra población (11,2 millones de habitantes)", declaró el presidente del grupo estatal BioCubaFarma, Eduardo Martínez.
La Unión Europea se impuso como su propio objetivo vacunar al 70% de su población adulta de aquí al final del verano boreal.
Un objetivo que está en el aire ante las dificultades de aprovisionamiento.
La presidenta de la Comisión Ursula von der Leyen, presentó este miércoles un proyecto de certificado sanitario para volver "seguros" los viajes dentro del bloque.
El documento, llamado Certificado Digital Verde, registrará que el portador fue vacunado, es inmune u obtuvo un resultado negativo en un test PCR. Las autoridades esperan implementarlo a tiempo para salvar la temporada turística.
En América Latina, Brasil sigue destacando por sus pésimos resultados.
Con su récord de 2.841 fallecidos el martes, Brasil "es una advertencia de que mantener este virus bajo control requiere una atención continua", recordó la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Brasil es el segundo país del mundo con más víctimas mortales de la pandemia después de Estados Unidos, con un total acumulado de 282.127 muertos y 11,6 millones de casos desde que la enfermedad se reportó por primera vez en diciembre de 2019 en China.