El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, urgió el martes a la comunidad internacional a respaldar el combate contra el movimiento islamista palestino Hamás, que el 7 de octubre llevó a cabo una letal ofensiva desde Gaza contra el Estado hebreo.
"De la misma forma en que el mundo se unió para vencer a los nazis (...), el mundo debe unirse a Israel para vencer a Hamás", declaró Netanyahu en una conferencia de prensa en Tel Aviv junto al jefe de gobierno alemán, Olaf Scholz.
"Los de Hamás son los nuevos nazis, son Estado Islámico", dijo el mandatario israelí en una rueda de prensa en Jerusalén con Scholz, en la que es otra visita de un dirigente occidental a Israel tras el ataque por sorpresa de Hamás el 7 de octubre que acabó con la vida de 1.400 personas e hizo estallar la guerra con las milicias palestinas de Gaza.
"Hace 80 años, nuestro pueblo experimentó el peor salvajismo en la historia de la humanidad con los crímenes nazis en suelo de Alemania y Europa", dijo Netanyahu a Scholz, reiterándole que "el salvajismo perpetrado por los asesinos de Hamás llegando desde Gaza fueron los peores crímenes contra los judíos desde el Holocausto".
También remarcó que las masacres cometidas durante el ataque de Hamás de hace once días "recuerdan los crímenes nazis del Holocausto", cuando se exterminó a unos seis millones de judíos.
Ante ello, aseguró que Israel lleva a cabo una respuesta militar adecuada contra Gaza -donde ya han muerto al menos 3,000 personas por los bombardeos israelíes-, y pidió a la comunidad internacional que respalde a Israel en su lucha.
"Así como el mundo se unió para derrotar a los nazis y Estado Islámico, el mundo tiene que permanecer unido con Israel para derrotar a Hamás", declaró Netanyahu, que acusó al grupo palestino de ser parte del llamado "eje del mal" con Irán y la milicia chií libanesa Hizbulá. Esta última también ataca estos días a Israel por su frontera norte, lo que dejó al menos 5 muertos del lado israelí.
Por su parte, Scholz condenó ante Netanyahyu el ataque “cruel y sanguinario de Hamás contra civiles inocentes”, y el secuestro de hombres, mujeres y niños que “hace helar la sangre”.
“Está claro que Israel tiene el derecho inalienable por la ley internacional a defenderse contra este terror; todo Estado tiene la obligación de proteger a sus ciudadanos”, dijo Scholz, recordando que hay también alemanes entre los rehenes cautivos en Gaza.
A su vez remarcó que el Gobierno alemán "procura que el conflicto no escale" para "evitar que se convierta en un incendio de gran dimensión", ante lo que hizo una "expresa advertencia" a cualquier otro país o actor que tuviera intención de "intervenir desde fuera".
“En los días pasados hemos hecho llegar este mensaje por canales diplomáticos a quienes deben recibirlo”, dijo.
En relación a los ataques israelíes sobre Gaza, Scholz aseguró que se deben hallar "vías para hacer llegar ayuda humanitaria lo antes posible a la población de Gaza", que se ve privada de comida, agua, combustible o provisiones médicas por un cerco israelí aún vigente.
"El destino de los civiles en Gaza no nos deja indiferentes", abundó el canciller.
Tras su paso por Israel, y con el objetivo de facilitar un acceso humanitario a Gaza, Scholz viajará a Egipto, donde se reunirá mañana con el presidente, Abdelfatah al Sisi, para tratar la cuestión.
También se espera que mañana llegue a Israel el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para una visita en la que abordará la situación con las autoridades israelíes.
La cifra de palestinos fallecidos en la Franja de Gaza desde el comienzo de la guerra entre Israel y las milicias del enclave alcanzó este martes los 3,000, informó el Ministerio de Sanidad palestino, que anunció además que el número de heridos se elevó a más de 12.500.
Estas datos marcan un aumento de unos 200 muertos desde el último anuncio oficial el lunes por la noche y tras una nueva jornada de bombardeos israelíes en el marco de un conflicto que marca hoy su undécimo día consecutivo de hostilidades.