Una mujer anticubrebocas originaria de California está recompensando a niños y adultos mayores que no usen cubrebocas en público con al menos $1 dólar.
De acuerdo con los informes, la ex miss California USA, Carrie Prejean Boller, paga a las personas que no usen cubiertas en centros comerciales como Target y otros lugares de importante concentración y los convence de que sean “líderes” al negarse a seguir los protocolos sanitarios en contra de covid.
La ex reina de belleza, con ideología republicana y simpatizante de Donald Trump, ha creado su propia campaña anticubrebocas en varias zonas del estado y la ha estado promoviendo a través de redes sociales.
En su cuenta de Instagram, la mujer suele compartir fotos y videos en donde se muestra acercándose a personas y familias completas en tiendas minoristas para pagarles $1 dólar por no usar los cubrebocas a los que se refiere como “bozales”.
A los niños les suele decir que deben pensar y convertirse en “líderes” al ir en contra de los mandatos tanto en la calle como en sus respectivas escuelas, sin importar lo que digan las autoridades académicas o el resto de la sociedad.
“Eres la próxima Rosa Parks, eres el próximo Martin Luther King” dice la mujer, de 35 años de edad quien también es esposa del ex jugador de la NFL, Kyle Boller.
“Mañana, cuando vayas a la escuela sin cubrebocas, tu corazón se acelerará y estarás nervioso, pero quiero que sepas que estás haciendo lo correcto. Nunca, nunca lo cuestiones”, le dijo a un niño en uno de sus videos.
A los padres de los niños con los que habla también les da recompensas y se fotografía con ellos y el dinero.
Asimismo, exhibe la inconformidad de los adolescentes que tienen que usar cubrebocas en sus escuelas y los convence de que nadie debe obligarlos a usarlos, ni siquiera el gobierno de Gavin Newson, gobernador de California, cuando él mismo ha sido visto sin cubiertas en público o eventos masivos.
En un video, la mujer explicó que comenzó la campaña de recompensas a anticubrebocas después de llevar a sus hijos a Target para que eligieran juguetes como recompensa por haber sido enviados a la oficina del director de sus escuelas por no usar cubrebocas.
Después de que la revista Rolling Stone hiciera viral su movimiento, Boller exigió una investigación que demostrara el riesgo de mortalidad en niños que significaba el covid o estadísticas de niños enfermos de gravedad tan sólo en el estado.
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