Una mujer mató a su esposo al dispararle con un arma, mientras estaba internado en un hospital en Florida, Estados Unidos, por una enfermedad en fase terminal.
Ellen Gilland, de 76 años de edad, ingresó con una pistola al AdventHealth Daytona Beach y asesinó a su esposo Jerry Gilland.
El personal del hospital pidió el apoyo de las autoridades y al centro de salud llegó la Policía de la ciudad de Daytona Beach. Los oficiales intentaron persuadir a la mujer, quien se había encerrado en la habitación junto al cuerpo de su marido.
Tras una hora de negociación, los agentes lograron distraer a la señora, con una granada aturdidora que funciona con una ráfaga de luz y sonido. La mujer bajó la pistola y pudieron someterla.
Los trabajadores y pacientes del lugar fueron desalojados de las habitaciones cercanas, mientras los oficiales intentaban arrestarla. Ninguna otra persona resultó lesionada.
Tras ser capturada, Ellen declaró a las autoridades que tres semanas atrás había hecho un pacto con su esposo, debido a su grave estado de salud. La pareja acordó, según la mujer, que ambos morirían.
El matrimonio acordó que la mujer mataría a su marido y luego se suicidaría con la misma pistola. Sin embargo, la mujer decidió que no podría seguir el plan al pie de la letra.
Según contó Gilland, primero el objetivo era que él se disparara, pero al no tener fuerza en el cuerpo, la opción era que ella lo matara.
La mujer de Florida sigue capturada y en los siguientes días se le podría imputar el delito de asesinato en primer grado.