Unos diez jugadores latinos y afroamericanos del equipo de béisbol los Medias Rojas de Boston, campeón de la Serie Mundial 2018, dieron este jueves plantón al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en una recepción en la Casa Blanca, informaron medios de comunicación locales.
Algunos de ellos habían explicado públicamente el motivo de su ausencia al evento y otros no.
Uno de quienes detalló la razón fue su entrenador, Alex Cora, quien precisó el domingo a los periodistas que no pensaba acudir a la Casa Blanca por la gestión que la Administración de Trump había hecho de la respuesta al huracán María, que asoló Puerto Rico en septiembre de 2017 y dejó unos 3.000 muertos.
Cora, originario de Caguas, en Puerto Rico, señaló a la prensa que "algunas cosas en casa están geniales", pero reconoció que todavía queda mucho por hacer.
"Esa es nuestra realidad -subrayó.- Saben, es bastante duro, saben, ir a celebrar cuando estamos donde estamos. Preferiría no ir. Y, saben, simplemente (quiero) ser coherente con todo".
Junto a Cora, algunos de los jugadores que no asistieron este jueves a la Casa Blanca fueron los afroamericanos Mookie Betts y David Price y el también puertorriqueño Christian Vazquez.
Pese a las ausencias, Trump recibió a los otros miembros del equipo que acudieron a la mansión presidencial.
"A lo largo de la temporada 2018, los Medias Rojas fueron, francamente, imparables", destacó el Presidente, quien agregó que siempre jugaron como "campeones".
Trump afirmó que le gusta el béisbol, al que llamó "un juego muy especial, un deporte muy especial", que él mismo practicó en la escuela de secundaria.
El Presidente destacó las contribuciones al juego del equipo de jugadores que sí acudieron al acto como Nathan Eovaldi, Chris Sale, y Steve Pearce, pero no mencionó a los ausentes.
Preguntado por la prensa, el mandatario dijo que le gustaba ese equipo y defendió la gestión de la crisis ocasionada por el huracán María de su Administración.
"A la gente de Puerto Rico debería gustarle de verdad el presidente Trump", dijo el jefe de Estado.
A comienzos de esta semana, Trump recibió en la Casa Blanca al golfista Tiger Woods para entregarle la Medalla de la Libertad.
En el pasado, el Presidente ha criticado frecuentemente a los jugadores afroamericanos de la NFL, el fútbol americano, que han protestado por la violencia policial contra los negros arrodillándose en los partidos durante el himno nacional.