La tormenta Laura se convirtió este martes en huracán en el Golfo de México, con vientos de 120 km/h que amenazan la costa estadounidense tras dejar una veintena de muertos en Haití y República Dominicana, así como algunos algunos daños en Cuba.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) dijo que se espera que Laura se fortalezca antes de llegar el miércoles a las costas del suroeste de Luisiana y parte de Texas.
"Laura se convirtió en un huracán con vientos máximos sostenidos de 120km/h, con rachas más fuertes" y "se pronostica un fortalecimiento significativo en las próximas 48 horas" en tanto "se espera que Laura sea un huracán mayor cuando toque tierra", afirmó el boletín del NHC.
El gobernador de Luisiana, John Bel Edwards, dijo en Twitter que se espera que Laura "toque tierra al menos como un huracán de categoría 3".
"Asegúrense de estar preparados, tengan lo necesario y sigan las noticias locales para estar informados", agregó en su llamado de atención a los habitantes del estado.
El NHC advierte que la marejada ciclónica "estará acompañada por olas grandes y destructivas" en algunos lugares, en tanto que hasta 300 mm de lluvias podrían causar inundaciones repentinas.
Laura se desplaza a unos 28 km/h, alejándose de Cuba y adentrándose en el Golfo de México, para acercarse luego a "la costa superior de Texas y el suroeste de Luisiana el miércoles en la noche". Luego se moverá tierra adentro en esa zona el jueves.
El ciclón pasó el lunes por Cuba, donde dejó intensas lluvias y fuertes marejadas, y antes por la isla La Española, que comparten Haití y República Dominicana, dejando una estela de al menos 24 muertos.
En Haití, Laura dejó el domingo 20 muertos: un bebé, un niño de ocho años, diez hombres y ocho mujeres, según un reporte oficial. En República Dominicana, dejó cuatro fallecidos.
Las tormentas representan un grave peligro para Haití y República Dominicana, pues las lluvias por sí solas amenazan con deslizamientos de tierra y desbordes repentinos de cursos de agua debido a la desertificación.
La Española también soportó los efectos de la tormenta Marco, que se degradó a depresión.
En Cuba, en tanto, Laura provocó fuertes lluvias, marejadas e inundaciones costeras, aunque no se informó oficialmente de daños personales.
Los vientos afectaron algunos techos de zinc de medio millar de viviendas, en tanto provocaron la caída de árboles y postes, según informes de las autoridades y reportes de la prensa de provincias.
Un total de 334.000 personas debieron ser evacuadas en toda la isla y llevadas a lugares seguros, según la Defensa Civil.
La temporada ciclónica del Atlántico, que se extiende desde el 1 de junio al 30 de noviembre, podría ser especialmente severa este año. El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos espera 25 depresiones, siendo Laura la decimosegunda y Marco la decimotercera.
En tanto, Marco se degradó a depresión y sus efectos debían desvanecerse este martes.
Las trayectorias de Laura y Marco obligaron además a evacuar 114 plataformas petroleras del Golfo de México.