La falsa heredera ruso-alemana Anna Sorokin, acusada a finales de abril de haber robado decenas de miles de dólares a bancos, hoteles y amigos, fue condenada este jueves en Nueva York a una pena de cárcel de mínimo cuatro años.
Sorokin, de 28 años, se inventó una nueva identidad al llegar a Estados Unidos en 2016, presentándose como una heredera cuando en realidad era hija de un exconductor de camiones ruso que se mudó a Alemania cuando tenía 16 años.
La jueza Diane Kessel le impuso una condena de entre cuatro y 12 años ante una sala abarrotada de gente, en el tribunal estatal de Nueva York, indicó una portavoz del fiscal de Manhattan.
Con astutas mentiras y una inaudita confianza en sí misma, la joven, que decía llamarse Anna Delvey, consiguió que varios bancos le prestaran decenas de miles de dólares.
Tras un mes de juicio, un jurado consideró que la joven era culpable de ocho de los 10 delitos de fraude y robo que se le habían imputado.
La farsa comenzó con su llegada a Estados Unidos, cuando se involucró rápidamente en los círculos sociales de moda de Nueva York.
De noviembre de 2016 a agosto de 2017, logró viajar gratis en aviones privados y vivió meses en lujosos hoteles de Manhattan cuyas cuentas nunca pagó, según la fiscalía de Nueva York.
Sorokin prometió que pagaría el dinero que debía, incluyendo una cuenta de 11.000 dólares en el hotel The Beekman en Manhattan, que no abonó después de una estancia de 16 noches.