La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, condenó este miércoles el levantamiento del Ejército en Bolivia, donde el Gobierno denunció un "intento de golpe de Estado" tras la irrupción de un tanque militar en las puertas de la sede del Ejecutivo en la ciudad de La Paz.
"El levantamiento de algunas unidades de las Fuerzas Armadas de Bolivia es un atentado contra la democracia. Condenamos enérgicamente estos hechos. Nuestro apoyo incondicional al presidente Luís Arce y a su pueblo", escribió en sus redes sociales Sheinbaum, quien asumirá el cargo el 1 de octubre.
La mandataria electa, del mismo partido del presidente Andrés Manuel López Obrador, el gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena), también ofreció su "respaldo al posicionamiento del Gobierno de México".
Minutos antes, el actual mandatario mexicano expresó "la más enérgica condena" al "intento de golpe de Estado" y respaldó a Arce, quien es considerado aliado de López Obrador en la política internacional.
"Manifestamos la más enérgica condena al intento de golpe de Estado en Bolivia. Nuestro total apoyo y respaldo al presidente Luis Alberto Arce Catacora, auténtica autoridad democrática de ese pueblo y país hermano", publicó el gobernante mexicano en X.
El vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca, denunció que se desarrolla un "golpe de Estado" contra el Gobierno de Luis Arce porque un tanque entró a la fuerza a la sede del Ejecutivo en la capital.
El Comandante General del Ejército boliviano Juan José Zuñiga amenazó que tomaría la sede del Ejecutivo y cambiaría "el gabinete de Gobierno".
A las 15:51 hora local (19:51 GMT) el tanque tiró las puertas de la sede del Gobierno boliviano, y el comandante Zuñiga y un grupo de militares entraron al edificio y siete minutos después salieron.
Zuñiga no brindó declaraciones e ingresó de nuevo al tanque en el que se moviliza.
El comandante encabezó el movimiento de Fuerzas Armadas después de rumores de su destitución, luego de brindar una polémica entrevista en televisión, en la que amenazó con capturar al exmandatario Evo Morales (2006-2019) si este se lanzaba como candidato presidencial.