El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recibe este miércoles en la Casa Blanca a su par de México, su "amigo" Andrés Manuel López Obrador, en medio de críticas en ambos países azotados por la pandemia del coronavirus.
"Será una gran reunión. Es un buen hombre. Es amigo mío. Y tenemos una gran relación con México", dijo Trump horas antes del encuentro.
AMLO, como se conoce al presidente mexicano por sus iniciales, tuiteó una foto suya esta mañana en el Memorial de Lincoln en Washington DC. "Quiero mantener una buena amistad con Estados Unidos, eso es lo que nos conviene", señaló el martes, al emprender su primer viaje al exterior en 18 meses de gobierno.
Atrás parecen haber quedado los epítetos que marcaron las campañas electorales de ambos.
Horas antes, el presidente de México colocó ofrendas florales en los monumentos a Abraham Lincoln y Benito Juárez, en Wahsington.
En 2016, el republicano Trump llamó "violadores" y "criminales" a los mexicanos y prometió levantar un muro fronterizo. En 2017, en su libro "Oye, Trump", el izquierdista López Obrador consideró una "canallada" la retórica antiinmigrante de su par estadounidense, que comparó con la de Adolf Hitler.
Pero ahora los dos quieren celebrar la entrada en vigor hace una semana del T-MEC, la nueva versión del acuerdo de libre comercio norteamericano de 1994. Para Trump es una promesa electoral cumplida; para AMLO es la apuesta para impulsar la economía mexicana en recesión.
"Esta relación bilateral diría que es la más fuerte entre Estados Unidos y México", dijo el martes a periodistas un alto funcionario de la administración Trump.
Como prueba, dijo, están las ofrendas florales que AMLO depositó ante los monumentos de Abraham Lincoln y Benito Juárez, dos expresidentes que mantuvieron "una muy respetuosa y fuerte relación" en el siglo XIX.
Pero la visita de trabajo, que incluirá un mano a mano en la Oficina Oval, un encuentro ampliado entre ambas comitivas y una cena con una decena de poderosos empresarios de México, entre ellos Carlos Slim, el hombre más rico del país, ha generado polémica.
"El momento de la visita no es muy feliz, tanto por la pandemia --los casos están en aumento en ambos países-- como por las elecciones en Estados Unidos, para las que faltan solo cuatro meses", dijo a AFP Michael Shifter, presidente del Diálogo Interamericano con sede en Washington.
Con más de 131.000 muertos, más de 3 millones de casos y récords diarios de nuevos contagios, Estados Unidos es el país más afectado del mundo por la covid-19. AMLO también lidia con el coronavirus en México, quinto globalmente por número de fallecidos (más de 31.000).
Trump, que busca la reelección en noviembre, aparece nueve puntos en promedio en las encuestas por debajo de su rival demócrata Joe Biden, con quien AMLO ya anunció que no se reunirá.
Para muchos, la cita es un "espaldarazo electoral" al magnate republicano. Así lo dijo el excanciller mexicano Jorge Castañeda (2000-2003), que tildó de "innecesaria" y "con muchos riesgos" la visita.
Miembros hispanos del Congreso estadounidense denunciaron que el encuentro solo busca "desviar la atención del coronavirus" y ocultar la "incapacidad" de Trump para atender la pandemia.