El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó este lunes que la extradición del narcotraficante Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, el pasado viernes ocurrió para no dar pretextos de "politiquería" a Estados Unidos en medio del proceso electoral de aquel país.
“Es importante que no se dé motivo a quienes utilizan el tema de narcotráfico con propósitos politiqueros en Estados Unidos. Hay dos temas que se utilizan mucho cuando hay elecciones en Estados Unidos: lo del narcotráfico y la migración”, dijo el mandatario durante su rueda de prensa matutina.
El pasado viernes, el Departamento de Justicia estadounidense confirmó la extradición de Guzmán a Chicago, donde se le juzgará por delitos relacionados con el narcotráfico.
Guzmán, arrestado por las autoridades mexicanas en enero pasado, era uno de los narcotraficantes más buscados por Estados Unidos por su participación en el tráfico de fentanilo y enfrenta ahora una serie de cargos federales en diferentes tribunales del país.
Al respecto, López Obrador confirmó que México tiene un convenio de colaboración con Estados Unidos para extraditar a presuntos delincuentes, por lo que el traslado de Ovidio fue a petición del Gobierno de aquel país.
“La solicitud la recibe la Secretaría de Relaciones Exteriores y, si se autoriza, se turna a la Fiscalía General de la República, se notifica a la persona que se va a extraditar, (que) tiene oportunidad de ampararse, de acudir a un juez. En este caso no hubo, según entiendo, ninguna solicitud de amparo y se procedió a llevar a cabo la extradición”, apuntó.
Recalcó que el tema del narcotráfico está muy vigente entre los políticos de Estados Unidos que tienen como estrategia hablar de “drogas, de fentanilo y culpando a México” al igual que con la migración.
“No se puede estar haciendo publicidad, propagando politiquería tratando de afectar a México. Precisamente, para no dar ningún pretexto, para que no quede ninguna excusa, cuando se presentan estas solicitudes (de extradición) se aplican y es lo que se hizo en este caso (de Ovidio)”, enfatizó.
El Cártel de Sinaloa, según Estados Unidos, es el grupo narcotraficante "más poderoso del mundo" y responsable en gran parte de la producción y manufactura de fentanilo para su distribución en Estados Unidos, donde esa droga, considerada 50 veces más potente que la heroína, es "la principal causa de muerte entre los estadounidenses de 18 a 49 años".
Guzmán y sus hermanos, conocidos como los "Chapitos", también están acusados de trasportar "sistemáticamente" toneladas de cocaína desde y a través de Sur y Centroamérica hasta Estados Unidos, de acuerdo con el Departamento de Justicia.
Las autoridades estadounidenses apuntan que esa organización ha estado involucrada en actividades de tráfico de drogas hacia Estados Unidos y violencia desde hace más de una década y media.