Estados Unidos afirmó este viernes que no ha percibido un aumento notable en los cruces de migrantes a través de la frontera con México en las primeras horas después de la eliminación del Título 42, la política de expulsiones rápida que se implementó bajo el pretexto de la pandemia de covid-19.
Blas Núñez-Neto, subsecretario de Política Fronteriza e Inmigración del Departamento de Seguridad Nacional, reconoció en una rueda de prensa que aún es temprano para proporcionar datos oficiales, pero aseguró que las autoridades se mantienen observando cualquier evento que suceda en la frontera.
"No hemos observado ningún incremento sustancial en la migración esta mañana", explicó el funcionario, aunque añadió que las detenciones en el área continúan siendo "elevadas".
Con el fin de la emergencia sanitaria en la medianoche pasada, Estados Unidos dejó de aplicar el Título 42, que permitía expulsar rápidamente a migrantes indocumentados sin opción de solicitar asilo debido a la pandemia, pero estableció otras limitaciones en la frontera y comenzó a deportar a través de otra reglamentación conocida como Título 8.
Núñez-Neto advirtió que desde ahora, todas las personas que crucen la frontera sin un estatus migratorio regular "no serán elegibles para el asilo", serán expulsadas del país rápidamente y podrían prohibírseles la entrada a Estados Unidos durante cinco años.
Al menos 24,000 agentes de la patrulla fronteriza vigilan la región, además de los 1,500 soldados que el Pentágono irá desplegando progresivamente en los próximos días.
El funcionario explicó que con la anulación de la emergencia sanitaria, las autoridades ya no están obligadas a realizar pruebas de covid a todos los migrantes, por lo que las detenciones se llevarán a cabo de manera "mucho más rápida".
Núñez-Neto instó nuevamente a los migrantes a buscar rutas legales para ingresar a Estados Unidos y a "no prestar atención a las mentiras" de los traficantes de personas que ponen "en riesgo sus vidas" al prometerles ayuda para cruzar la frontera.
El funcionario de migración aseguró que el número de citas disponibles para solicitar asilo en línea se ha incrementado a 1,000 diarias, y animó a utilizar este método.
Además, recordó que venezolanos, cubanos, nicaragüenses y haitianos pueden solicitar a través de internet un permiso humanitario para ingresar a Estados Unidos si cuentan con un patrocinador en ese país.
Aquellas personas de estas nacionalidades que crucen la frontera sin autorización serán deportadas automáticamente a México, en lugar de sus respectivos países.
"Continuaremos monitoreando cuidadosamente la situación en el terreno, incluidos los arrestos y el espacio en nuestros centros de detención", afirmó.
Por otro lado, el canciller de México, Marcelo Ebrard, declaró en otra rueda de prensa que el flujo de migrantes ha estado "disminuyendo" en las últimas horas y que no ha habido "enfrentamientos ni situaciones de violencia en la frontera".
Referente a las principales ciudades fronterizas, las autoridades mexicanas registran 10.000 migrantes en Ciudad Juárez, 5.500 en Matamoros y 500 en Tijuana que esperan cruzar a Estados Unidos.